Ver?nica Mart?nez Garc?a
Ma?ana 12 de diciembre el pueblo de M?xico celebra a la Virgen de Guadalupe, la madre de todos los mexicanos. Es una fiesta de fe, tradiciones, milagros y esperanza para muchas familias de nuestro pa?s. De todo el territorio nacional, la gente acude a la Bas?lica de Guadalupe en la Ciudad de M?xico a venerarla.
Desde antes del 12 de diciembre, las y los mexicanos realizan las peregrinaciones y los rosarios como una manifestaci?n de amor y devoci?n; en ellas participan familias enteras, sectores diversos de la sociedad, vecinos en colonias y ejidos, etc. Se acompa?an de cantos y representaciones en honor del indio Juan Diego y de la Virgen de Guadalupe.
Seguramente todos conocemos la historia de las apariciones. Fue en diciembre de 1531 en el cerro del Tepeyac. La sant?sima virgen le pide a Juan Diego que le cuente al Obispo Fray Juan de Zum?rraga que ella desea se erija un templo en su honor. El Obispo le pide una prueba para saber que es verdad. La Virgen de Guadalupe le dice a Juan Diego que recoja unas rosas y las guarde en su tilma, para que se las muestre a Fray Juan de Zum?rraga. Cuando le ense?a las flores, ?stas al caer dejan al descubierto la imagen plasmada de la virgen en la humilde prenda del indio. Esto ocurri? un 12 de diciembre de aquel a?o.
En el monte se edific? una ermita a la que se le fueron a?adiendo m?s templos hasta culminar con la gran Bas?lica de Guadalupe que tiene una capacidad para alrededor de 10 mil personas.
Cada 12 de diciembre, miles de mexicanos acuden a la Bas?lica a mostrarle a la sant?sima madre su amor, devoci?n, agradecimiento o pedirle un milagro. Ese d?a, nuestra naci?n refleja una de las mayores expresiones religiosas y de fe hacia la Virgen de Guadalupe, que traspasa incluso nuestras fronteras. Es una tradici?n centenaria que se ha trasmitido de generaci?n en generaci?n y que ha perdurado desde entonces.
Como mexicanos debemos fomentar estos valores tan arraigados en nuestra sociedad y procurar que permanezcan en el coraz?n de las familias, en especial de los hijos para preservarla.
En estos tiempos donde vivimos de forma apresurada, con transformaciones a un ritmo acelerado en tecnolog?as, modas y costumbres, es cuando m?s necesitamos conservar nuestra esencia de pueblo pac?fico con fe, del amor al pr?jimo y del respeto a nuestros santos. Un?monos en paz y con entusiasmo a las celebraciones de la Virgen de Guadalupe. Ma?ana martes ser? un grandioso d?a para los guadalupanos y para todo M?xico.