Un 10% de mortandad registran los hatos por sequía
-Reducen exportaciones de 1,500 a 500 cabezas de ganado
Por: Cristina Flores Cepeda
Sabinas, Coah.- Los terrenos y las vacas están agotadas de tanta seca y, aunque se registren algunas lluvias no se recuperan tan fácilmente, dijo el presidente de la Asociación Ganadera local de Sabinas y San Juan de Sabinas Alejandro Gutiérrez Balderrama, quien añadió que los hatos se han reducido hasta un 10% debido a la mortandad, aunque la producción de carne no se ha disminuido, por el contrario hay mayor producto porque los mismos dueños de ranchos prefieren sacrificar ganado para poder alimentar a un porcentaje determinado y salir adelante de esta crisis que se vive.
En cuanto a la situación que prevalece en torno a los ganaderos dijo que estaba muy crítica pues los ranchos están realmente muy secos; “la sequía es extrema y aunque han caído algunas aguas han sido parciales, no en general. En todas las áreas hay ranchos que ya reportan humedad, pero los terrenos y las vacas están cansados de tanta seca. No es tan fácil que se recuperen, aunque caiga algo de agua porque de inmediato el sol vuelve a quemar el pasto y eso dificulta la alimentación”.
Agregó que le han reportado el 5 y 10% de reducción en los hatos por mortandad debido a esta sequía. “Eso no quiere decir que haya disminución de carne, ya que se incrementaron los sacrificios porque los ranchos no pueden alimentar las vacas y, en vez de que se mueran, los mandan el rastro”. Dijo que la calidad sigue siendo buena ahora lo que ocurre es que es menor el peso. Anteriormente destetaban hasta los 200 kilos para mandarlos a la exportación, pero ahora los becerros que se envían son de 2 a 3 meses, con un promedio de 130 kilos, lo que significa que es bastante pérdida. También la parición en los hatos ha disminuido mucho.
“En la frontera se nota, pues antes exportábamos por Eagle Pass y Del Río, Texas, alrededor de 1, 500 cabezas de ganado semanales y ahorita apenas llegamos a las 500 por una sola frontera donde se conjuntan los dos puertos. Esa es la realidad a la que se enfrentan los productores ganaderos en la carbonífera”.
