Elementos de la policía municipal de Saltillo asignados al centro de la ciudad, atendieron a la denuncia contra un sujeto quién fue retenido por una pareja luego de que este acosó a una mujer que se dedica a vender flores tejidas de palma.
El sujeto en primera instancia, se puso agresivo con la pareja, los amenazó diciendo que él es empleado de la dirección de Ecología municipal, después dijo ser albañil, y luego también dijo ser jardinero.
Según la secuencia de hechos, la muchacha llegó a ofrecer su producto a una cantina y estando ahí, el sujeto le dijo que, si tenía permiso para vender, pues él trabaja en la dirección de Ecología, y si no tenía permiso le tenía que pagar a él una multa en ese momento, y la acusó por daño ecológico por utilizar las hojas de palma, para lo cual también debería de tener permiso o pagarle multa a él.
La mujer dijo que ella lo dejó hablando solo y se salió para avisarle a su novio por teléfono y que estaba en la llamada cuando una señora le avisó que el sujeto al
Parecer en estado etílico le estaba tomando fotos con su celular, y cuando ella volteó lo vio que de inmediato guardó el teléfono y le empezó a reclamar por lo que el sujeto la amenazó.
El hombre de nuevo entró a la cantina que se ubica en calle Pérez Treviño antes de calle Allende en pleno centro de Saltillo y este salió corriendo con su mochila para tratar de subirse a una combi, pero ella no se lo permitió.
Perseguido por la afectada en la plaza Manuel Acuña junto con su novio, quien se unió a perseguir al sujeto hasta interceptarlo en la esquina de Narciso Mendoza y Padre Flores, en donde en presencia de varios testigos, el sujeto dijo que le valía que lo acusaran de lo que quisieran, “pues él tenía amigos en todos lados y se iba a desquitar”
Al pedir ayuda a elementos de la policía municipal que se encuentran en la caseta a un lado del Mercado Juárez. Dijeron que no podían moverse de allí porque los arrestaban y que eso les correspondía a los policías de la caseta que se ubica en la esquina de Allende y Aldama, pero estos tampoco quisieron dar el apoyo.
Al final sí llegó a una conciliación entre las partes, ya que intervino una representante de los vendedores y comerciantes del centro histórico de Saltillo, sin embargo, los afectados señalaron las cosas no quedarían así, interpondrían una denuncia formal.
