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San Felipe y el Hondo, 120 años después de la primera tragedia minera

San Felipe y el Hondo, 120 años después de la primera tragedia minera

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Por: Cristina Flores Cepeda

Sabinas, Coah.- Aunque tras 10 años de investigación, la primera tragedia que pudo ser detectada se presentó el 31 de marzo de 1885 en la misma localidad de San Felipe y El Hondo, el profesor Ramiro Flores Morales, historiador, señaló que sin embargo documentada es la del 31 de enero de 1902 (hace 120 años), en donde 141 mineros murieron al explotar la mina en la que laboraban tras un acumulamiento de gas metano. “Fue una de las más grandes y que trascendió más allá de nuestro Estado a nivel nacional e internacional, como sería también la de Pasta de Conchos que a la fecha se ha mantenido una fuerte defensa por parte de los deudos en espera de justicia”.

Desde que empezó la minería, el ramo de los accidentes y de los obreros fue celosamente muy guardado, hermético y custodiado, en aquellos tiempos, en la actualidad es diferentes pues de inmediato los medios de comunicación dan cuenta de los hechos y las familias tampoco se quedan calladas, entonces las cosas han cambiado en estos más de 100 años que la minería ha sido el principal sostén económico.

“No podemos negar que la base de la economía  en esta región es el carbón, de eso nadie tiene duda, pero también, la estela de muerte que ha dejado es una muestra clara que cada tanto, las entrañas de la tierra exigen el pago de tributo. El profesor Ramiro Flores Morales, como historiador y autor del libro San Felipe y el Hondo, una cuenta pendiente con la historia señaló que “durante años documenté lo ocurrido en ese lugar y edité el libro que lleva ese nombre y que lo hemos presentado en diferentes partes, porque la gente está interesada en estos temas”, señaló.

Hace 120 años ocurrió la primera gran tragedia carbonera. A la fecha la larga estela se extiende a 125 con un negro saldo de miles de fallecidos; “podemos hablar de un aproximado de 1500 de aquellos que han acaecido por el llamado vaho del diablo o aliento de satanás  (el gas grisú), pero son otros tantos que han muerto por inundaciones, -caídos-, etcétera. Tomando en cuenta todos ellos  la cifra se duplica”.

 

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