El objetivo es claro, borrar cualquier recuerdo del Mundial de Qatar.
Terminada anoche la temporada de Primera División, desde la Federación Mexicana de Futbol ya se preparan para poner el ‘producto’ Selección a trabajar a todo lo que da. A pesar del desencanto y molestia por el Mundial, a los que generan dinero y muchos millones con el producto Selección lo quieren al máximo.
El objetivo es claro, borrar cualquier recuerdo del Mundial de Qatar y volver a meter a la gente al fenomeno Selección para seguir facturando en diferentes ciudades norteamericanas y vendiendo productos oficiales.
No termina nunca la gallina de los huevos de oro, a pesar de provocar tantos malestares. Diego Cocca, al que muchos no quieren, tendrá partidos oficiales en los próximos días. Obligado a ganar la Nations League ante los vecinos del norte y después ganar la Copa Oro y hacerle ganar muchos millones a la Concacaf.
México intenta volver a ser el rey del área, pero le costará mucho trabajo.
Del cambio generacional no hay que hablar, porque lo único que le vale a Cocca son títulos y alegrías a la gente para que vuelva a entrar en la ilusión del negocio. Ésa que se da con buenos resultados y termina por dormir al pobre fanático.
Los seguirá engañando y ellos seguirán mordiendo la carnada para hacer ganar cantidades increíbles de millones de dólares. Si el señor Diego Cocca no entrega buenos resultados en el verano que viene, ya hay varios que quieren otro tipo de técnico para llegar al Mundial de 2026. Así de fuerte el asunto.
El verano que viene estará lleno de partidos de baja calidad. El verano que viene incluye títulos oficiales y, aun así, a nadie le importa. El producto Selección está tan golpeado que tienen que hacer cosas diferentes para que la gente vuelva a creer en ellos.
Con como un grupo musical que se presenta en su gira y trata de convencer al público para que los vaya a ver. El verano que viene incluye muchos partidos concacafkianos, esos de bajo nivel con muchas patadas.
No hay motivos por los cuales haya que ver a la Selección, nada que emocione o ilusione. El verano que viene es negocio al por mayor y el señor Cocca se lo tiene que comer completo. No sabe Cocca dónde se metió. Es el verano que viene.