Tras lograr su primer título de la NFL con Los Angeles Rams ante los Bengals, el mejor defensivo de la liga dejó abierta la puerta del adiós
MEDIO TIEMPO
SoFi Stadium, Los Ángeles.- En el alto rendimiento se dice que hay que saber decir adiós con gracia antes de que el deporte lo retire a uno y eso podría hacer Aaron Donald tras ganar el Super Bowl LVI este domingo frente a sus aficionados en el SoFi Stadium de Los Ángeles. Considerado el mejor tacle defensivo de la NFL, el número 99 de los Rams no se comprometió a volver para la Temporada 2022.
«Quiero abrazar el momento, disfrutarlo con mis compañeros y mi familia. Lo quiero disfrutar un día o tal vez dos, esto es una bendición y sobre el futuro, ya veremos», declaró el hombre que con una captura a Joe Burrow selló el triunfo de L.A. por segundo vez en el Super Bowl.
En apenas su octava temporada en la NFL desde que los Rams lo seleccionaron en la primera ronda del Draft 2014, Aaron Donald ya tiene una carrera digna del Salón de la Fama como uno de los más dominantes defensivos que ha existido y siente que oye de decir «misión cumplida» a la organización.
«Esto es como cerrar el círculo. Una franquicia a la que le debo todo como jugador, que me tomó en 2014 para devolverla a lo más alto, que de St. Louis nos mudamos a Los Ángeles y por fin podemos decir que somos los mejores del mundo en esto», señaló.
Matt Stafford, la imagen tierna del Super Bowl
Con tres pases de anotación este domingo, Matthew Stafford fue de las piezas clave para la victoria de los Rams, que también le permite quitarse la amargura de los 12 años que pasó en Detroit sin una victoria en Postemporada. Para esta campaña llegó a los Rams y logró cuatro victorias en estos Playoffs, incluido el SBLVI.
«Agradezco a la organización y al coach McVay porque confiaron ciegamente en mí, me querían aquí para ayudarlos a llegar a lo más alto y es gracias a todos ellos qué hoy puedo decirme campeón. Mis compañeros son lo máximo y me alegro especialmente por Aaron (Donald), es una inspiración», declaró el quarterback, cuyas tres hijas se robaron las miradas ante las lentes de la prensa en las entrevistas posteriores, acompañando a su padre en el estrado.
