La tasa de interés es el excedente que pagamos por utilizar un dinero que no nos pertenece, en palabras concretas, es el precio del dinero, sí, el dinero también tiene su precio.
Las tasas de interés en México, tiene como referencia la TIIE, la cual es la tasa de interés que desde el año de 1996, el Banco de México, establece como base para el resto de las tasas de interés, en todos los mercados, tanto el que pagamos lo que tenemos créditos o préstamos, como la que pagan las instituciones financieras por inversiones.
A finales del mes de septiembre, la autoridad monetaria de nuestro país, es decir Banxico, redujo la tasa de interés para establecerla en 4.25 por ciento. A pesar de tener una tasa demasiada baja, hay margen para reducirla un poco más, ¿el motivo?, la reactivación de la economía mexicana. Te lo explico.
La reducción de las tasas de interés, reactivan la economía, ya que los empresarios podrían solicitar crédito, los cuales serían más baratos, aunado a esto, quienes tienen dinero ahorrado en inversiones, preferirían, iniciar un negocio, o invertir ese ahorro en una empresa ya establecida, debido a que sería de mayor beneficio económico, debido a la baja tasa de interés que pagaría la inversión.
Al reactivar la inversión directa, se generan empleos, compra de insumos, demanda de factores de producción, logrando colaborar en la reactivación de nuestra economía.
Al considerar el factor de la inflación, ésta es tan baja, que se está logrando que sea entre el 2 y 4 por ciento, con lo que la reducción de la tasa de interés no se lograría una inflación mayor, y así podriamos tener reactivación económica, baja inflación, aumento en el empleo formal, por supuesto aumento en el PIB, crecimiento económico, buscando lograr desarrollo y hasta felicidad.