Así es la vida de rancho en la navidad, poco lujo, pero mucho cariño que dar
Julio Olvera / Factor
Nueva Rosita, Coah. – Una familia de rancho durante esta temporada decembrina ha adornado un nopal como un único pino de navidad, demostrando que para tener el espíritu navideño no se ocupa gran cantidad de dinero, pues con el ingenio basta.
Esta próxima navidad en muchos hogares, no habrá una cena que celebrar, ni mucho menos un pavo que rellenar en convivencia familiar, debido a que no en todas partes hubo buenos resultados en el trabajo en los gastos de la energía eléctrica, en los altos precios de la canasta básica y gasolina. Pero no por ello deberán pasar una amarga navidad, ya que mientras exista el espíritu navideño, hay muchas maneras de ingeniárselas para que estas próximas fechas no pasen desapercibidas.
Así lo dijo la señora Ramona «N», quien vive a lo lejos de la ciudad, en un pequeño rancho donde casi todo para donde voltee uno, solo hay nopales, es ahí donde se le ocurrió la gran idea a su marido Don Ausencio «N», quién es abuelo y espera con ansias la llegada de sus nietos y sus hijos colocar unas luces navideñas en un nopal.
Es por ello que se le ocurrió esta maravillosa idea de colocar unas pequeñas luces alrededor de un nopal, sin importarle terminar lleno de espinas.
«Lo que vale es que ellos se impresionen al ver nuestro árbol navideño, no se necesita una gran cena, aquí con tamalitos y frijolitos de la olla en el fogón y una buena salsa con chile piquín del monte, molcajeteada y nuestro árbol de navidad y que nos acompañen nuestros hijos y vengan nuestros nietos pues somos felices», expresó Don Ausencio.
Poco de este tipo de ingenio, pero sobre todo de espíritu se ve en la región, demostrando así esta humilde familia que no hace falta un gran banquete o contar con una gran familia para pasar la navidad en armonía y felicidad.
«A veces, no hay para los regalos, pero uno hace su esfuerzo para poder darles un detalle a los niños que son los que esperan algo y uno como abuelo pues se las ingenia para darles lo que se pueda, el chiste es que no pase desapercibido y claro cuando se puede, se puede».
Finalizó la señora Ramona.
