ALBERTO BOARDMAN
Cuentos de buenas noches para adultos estresados
“Quien lee un cuento sabe o espera leer algo que lo distraiga de su vida cotidiana, que lo haga entrar en un mundo no diré fantástico —muy ambiciosa es la palabra— pero sí ligeramente distinto del mundo de las expectativas comunes”. Jorge Luis Borges.
El cuento, además de breve, es una narración concisa y ficcional o como bien apunta el maestro Julio Cortázar: “Un género redondo en sí mismo, audaz, definitivo, sin lugar a distracciones ni con cabos sueltos.” Representa una alternativa perfecta para escapar del aburrimiento gracias a su naturaleza envolvente en la que una buena historia incluso, puede llegar a reducir la ansiedad ocasionada por las exigencias y preocupaciones de la vida diaria.
Se ha comprobado que apartar la tecnología por la noche, justo antes de dormir, para en su lugar sustituir la televisión, computadora o celular por la sana costumbre de leer, permite a nuestro cerebro relajarse, soñar despierto y por ende, obtener un mayor descanso durante el reposo. En este contexto, la periodista británica Lucy Mangan publicó en 2019 el título: “Cuentos de buenas noches para adultos estresados”, editado por Plaza Janés, y que corresponde a una antología de narraciones breves con la intención de adquirir un ambiente de calma en los últimos minutos de la jornada.
La recopilación incluye verdaderos maestros de la literatura universal y por sus páginas desfilan relatos que van desde lo mítico como: “La extracción de la espada” de Andrew Lang; el espíritu poético en “El rayo de la luna” de Gustavo Adolfo Bécquer; la melancolía propia de la literatura rusa en “Las bellas” de Antón Chéjov; la cuidada prosa de “El gigante egoísta” de Oscar Wilde y hasta el humor de “El ratón” de Héctor Hugh Munro mejor conocido como Saki.
A menudo sabemos que hemos leído un buen cuento cuando su historia logra permanecer en nuestra memoria, y sin duda, más allá de su función terapéutica, esta colección de relatos cuenta con una variedad considerable de estilos que funciona como una genuina introducción a un género que nunca terminará de sorprendernos.
Somos lo que hemos leído y esta es, palabra de lector.