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Todo empieza en la familia

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Por: Ver?nica Mart?nez Garc?a

 

No especular? sobre lo sucedido en el Colegio Americano del Noreste de Monterrey. Lo ?nico que quiero compartir, es la importancia de la responsabilidad, los valores, el amor y la familia.

Los padres somos los responsables de formar a nuestros hijos, de cuidarlos, de ayudarlos a crecer en un entorno protegido, seguro, de demostrarles desde peque?os que son aceptados, respetados y amados.

Nuestros hijos, desde su primer etapa, pero principalmente en la adolescencia, deben percibir su casa como un lugar confiable en donde puedan exponer sus puntos de vista y expresar sus pensamientos y sentimientos

La falta de comunicaci?n dentro del n?cleo familiar, puede desencadenar sensaci?n de soledad y desesperaci?n.

Mis hijos a?n son muy peque?os, Emiliano tiene 3 a?os y Santiago tiene apenas un a?ito, pero cuando llego a la casa despu?s de largas horas de trabajo, me abrazan, me besan y demandan mi atenci?n de todas las maneras posibles. En ocasiones quieren controlar la situaci?n y me cuesta llamarles la atenci?n, pero s? que lo tengo que hacer

Nadie nos ense?a a ser madres o padres, aprendemos conforme van creciendo, pero hay valores que nunca debemos dejar de lado porque son fundamentales en su desarrollo. Este lamentable hecho nos ha estremecido tanto, que hemos volteado a ver y a cuestionarnos qu? es lo que estamos haciendo no solo como padres, ?qu? hacemos como sociedad?

Nos queda claro que tenemos que ser m?s vigilantes, no facilitarles el acceso a la tecnolog?a sin la adecuada supervisi?n. Darles m?s tiempo de calidad, estar m?s pendientes de sus cosas, de sus emociones, de sus miedos.

Corregir lo que hacen mal, y reforzar o reconocer lo que hacen bien. Poner reglas para el aprendizaje de h?bitos y conductas acordes a su edad? ayudarles a desarrollar sentimientos de autonom?a y seguridad. Hacerlos sentir guiados en su crecimiento personal, ellos sabr?n que si tienen reglas es porque los queremos y nos ocupamos de ellos, yo lo veo con mis hijos aunque a?n sean peque?os. Debemos ayudarles a desarrollar sentimientos de pertenencia a la familia, a la sociedad.

Que sepan que los amamos, y que siempre, en cualquier momento de su vida, vamos a estar ah? para ellos, para apoyarlos, para impulsarlos, pero tambi?n para corregirlos. Hagamos el esfuerzo de regresar el desarrollo humano a la esencia de la vida: todo empieza en la familia.