Se deslinda abogada; dice que ella ya no representaba a Don Román y tampoco recibió 200 mil pesos

Por: Cristina Flores Cepeda

Sabinas, Coahuila.- Ante hechos que ella considera difamatorios y con el objetivo de deslindarse de la problemática por la que atraviesa Don Román Quiñones que fue desalojado de la vivienda que habitó durante más de 43 años en el municipio de Múzquiz, pues ella ya no lo representaba, la licenciada Rosangela Morales Cruz señaló que mantuvo un juicio durante 4 años pero, en diciembre de 2022 la familia le señaló que ya no seguirían con ella como representante legal y que asignarían a otra persona en el caso. También desmintió que ella haya recibido la suma de 200 mil pesos como se le señala, incluso, dijo que de tres amparos que se interpusieron solo cobró por uno de ellos y las demás acciones emprendidas lo hizo a manera de atención a este humilde matrimonio de adultos mayores.

“En estos dos tres días se han manejado algunas situaciones a través de los diferentes medios de comunicación y por eso los invité para que me escucharan y aclarar que yo llevé el proceso durante aproximadamente 4 años; hubo una sentencia, apelaciones, amparos, exhortos, etcétera hasta diciembre de 2022, fecha en que dejé de ser representante legal de ellos porque así me lo solicitaron sus hijos y su nuera. Yo siempre me dirigí con su nuera, la señora Zoila de Quiñones y ella por eso está aquí para aclarar esta cuestión”.

Añadió que el trabajo se hizo en los juzgados. “Están expediente y debo aclarar que dijeron que me habían entregado 200 mil pesos, pero eso no es verdad jamás me fue entregada esa suma y siempre respondí a los señores. “Les estuve hablando tan es así que el día del desalojo yo no fui avisada porque ellos saben que no soy su abogada; claro que se me hicieron pagos sí, como a todos y con todo el respeto de la señora Zoila, porque ella siempre me respondió, pero, tampoco se me liquidó hasta la etapa en que yo terminé, pero no pasa nada. Hicimos viajes etcétera que tampoco se me liquidaron”.

Dijo que la situación es que ella dejó el caso en diciembre, pero en enero los exhortó a que contrataran un abogado porque necesitaban continuar con el proceso y “ellos me dijeron que hablarían con los demás hijos y lo hice más que nada por la atención hacia los señores que son adultos mayores considerando que no deberían dejar así el proceso pues ellos seguían en posesión del domicilio. Yo ya no pude hacer nada, estaba fuera de mi límite. Eso es lo que yo quería aclarar”, dijo la abogada, “porque no me parece justo que hagan esos señalamientos de situaciones que no son verdad, es injusto y la finalidad es limpiar mi nombre porque soy una persona que ha litigado mucho tiempo siempre de forma particular, a esto nos dedicamos y siempre hemos hecho buen trabajo. No me parece justa la difamación. Por eso invité al señor Quiñones y a su nuera que fungió como la representante o la intermediaria en este asunto”. Agregó que el caso es rescatable pero sí es importante que se haga una defensa.