SÉPTIMA ENTRADA
New York.- Todo parece indicar que la Major League Baseball (MLB) ya cumplió con uno de sus cometidos para la Temporada 2023: incrementar el número de robos de bases a lo largo de todo el circuito.
Con la estafa del segunda base de Philadelphia Phillies, Bryson Stott, en la cuarta entrada del enfrentamiento en el Citizens Bank Park el viernes por la noche, Grandes Ligas registró su base robada número 3,000 de la campaña.
La última vez que los jugadores del mejor béisbol del mundo robaron colectivamente 3,000 bases o más fue en la Temporada 2012. En ese año, el legendario jardinero de Los Angeles Angels, Mike Trout, lideró la estadística con 29 atracos.
Para nadie es un secreto que dicha cifra se le puede atribuir principalmente a los cambios de reglas aprobados por la MLB para esta campaña, especialmente la implementación del cronómetro de lanzamiento y el límite de reviradas por apariciones al plato.
Hasta antes de iniciar el juego del viernes, el promedio de bases robadas en toda la liga era de 0.71 por partido. Si esa cifra se toma en una temporada de 162 juegos, proyectaría 3,457 estafas totales, lo que representaría la segunda cantidad más alta desde 1920.
MÁS ROBOS DE BASE EN UNA TEMPORADA (ERA DE LA PELOTA VIVA)
1987: 3,585
1999: 3,421
1983: 3,325
1986: 3,312
1997: 3,308
