“La gente de la carbonífera no se dejará vencer”: Fernando Mendoza
*Producción de energía anual cuesta 120 mil millones de pesos
*CFE subsidia a las energías renovables con 160 mil millones de pesos
Por: Cristina Flores Cepeda
Sabinas, Coah.- Aunque reconoció que la región está impactada y no se repone del asombro de lo que estamos viviendo por la nula comercialización del carbón, porque nunca se preparó para un escenario como el de ahora, “instituciones educativas, personal, obreros de la cuenca están especializados en la producción de carbón, las inversiones más fuertes como la que anunció Santa Bárbara, son enfocadas precisamente al desarrollo minero, es decir, estábamos sin levantar la vista, dedicados a fortalecer la industria del mineral y en esa inercia nunca se previó que esa fuente de ingresos pudiera estar en peligro”, el ingeniero Fernando Mendoza Bernal, dijo que, afortunadamente el carácter de los coahuilenses y especialmente a la gente de la carbonífera no se va a dejar vencer por eso, pero necesita un mediano plazo en lo que tiene nuevas actividades económicas.
“Desde el punto de vista de esta tragedia, que no se puede llamar de otra manera, porque cuando un padre de familia es despedido se desespera, porque lo que sabe hacer es producir carbón, sin embargo recursos se tienen; aquí hay áreas de cultivo muy grandes y comenzar lo que debió ser hace mucho tiempo: la diversificación que involucre desde la educación; el no haberlo hecho ha sido una negligencia y un omisión que nos va a costar muchísimos problemas”.
Dijo que sí hay perspectivas de crecimiento en otras áreas como es la ganadería “y tenemos un río de casi 70 kilómetros de longitud, con mantos freáticos que pueden mejorarse con un programa hidrológico de captación de aguas para incrementar los niveles subterráneos, pero son obras que llevan tiempo”.
Pacto de París
En el ramo del carbón la amenaza es que no se utilice más para generación de electricidad, que es uno de los errores más grandes que se cometería porque el carbón sigue siendo en el mundo la principal fuente en la materia y los países que firmaron el Pacto de París, como México, se han retirado porque no pueden sostener el compromiso de disminuir su consumo en ese renglón y son altamente dependientes del mineral en sus economías. “Fracasarían cómo países, incluso algunos llegarían a la pobreza si no lo siguen utilizando. México, produce únicamente el 1.4% de gases de efecto invernadero, es decir no pinta a nivel mundial y el que aporta esa cifra es el transporte porque son millones de motores”.
Los países que generan el 60% de esos gases se retiraron del pacto, como son Estados Unidos, China e India e invierten en tecnologías para reducir la emisión de sus gases y eso es algo que puede hacer México en lugar de cerrar las plantas. “De continuar como hasta el momento, tendremos una generación perdida porque de ese tamaño es el impacto. Nos regresamos 40 años pero con una ventaja extra: hay muchos profesionistas egresados, nativos de esta región, que van a entrar al rescate sin llamarlos. El compromiso de todos los que hemos nacido aquí es pelear por la región con uñas y dientes si podemos hacerlo”.
La incongruencia
La Comisión Federal de Electricidad (CFE) paga más de 120 mil millones de pesos en la compra de combustibles, incluyendo gas natural, para generar electricidad este año. De acuerdo con las partidas aprobadas por parte del Congreso y además con la información de la empresa y el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2020, es un total de 120 mil 897.1 millones de pesos, pero las empresas privadas que generan energía eólica y solar reciben del gobierno federal, vía subsidios, alrededor de 160 mil millones de pesos anuales. Este subsidio de CFE a empresas privadas es por el respaldo, las regulaciones primaria y secundaria, por interconexión y porteo, es decir con dinero público se favorece a las privadas y la energía que producen tiene prioridad en su distribución y venta.
