Home COAHUILA CARBONÍFERA La banca que movió conciencias: Un faro de esperanza para el río Sabinas
La banca que movió conciencias: Un faro de esperanza para el río Sabinas

La banca que movió conciencias: Un faro de esperanza para el río Sabinas

0
0

Por: Cristina Flores Cepeda

Sabinas, Coahuila. – En un modesto espacio de apenas 600 metros lineales, dentro de los 150 kilómetros de recorrido del río Sabinas, desde su origen en las profundidades de Múzquiz hasta su desembocadura en la presa “Venustiano Carranza” en la comunidad de Don Martín en el municipio de Juárez, aquí en Sabinas, se erige un símbolo de cambio: una banca. Esta sencilla estructura, colocada estratégicamente a la altura del Mirador, marca el inicio de una serie de acciones trascendentales impulsadas por Lauro Isaac Castañeda Lozano, cuyo impacto resuena en la conciencia colectiva hasta el día de hoy.

El río Sabinas, designado como un sitio Ramsar, un humedal de importancia mundial, enfrenta una serie de desafíos que amenazan su integridad ecológica. A pesar de su relevancia ambiental, aún recibe aguas residuales y se ve afectado por diversas adversidades. Sin embargo, gracias al compromiso y la iniciativa de individuos como Lauro Isaac Castañeda Lozano, se están dando los primeros pasos hacia su preservación. Hay mucho por hacer, pero si se suman una serie de buenas acciones, a mediano plazo podrá verse el resultado.

El impacto de esta iniciativa trasciende las fronteras locales, atrayendo la atención e involucramiento de personas de diferentes regiones. Actividades como la limpieza, la pintura y eventos sociales, como el reciente torneo de pesca infantil, están generando un efecto positivo en la comunidad. La participación activa de alrededor de 30 niños, provenientes de diferentes municipios del Estado, Saltillo, Monclova, Ramos Arizpe y de la carbonífera, demuestra el potencial turístico y el interés que estas acciones despiertan.

El compromiso con la mejora del entorno abarca un amplio espectro de actividades, desde la restauración de seis palapas, hasta la planificación de conferencias y la instalación de luminarias. Además, se ha lanzará una convocatoria abierta para la pintura de murales, con el objetivo de involucrar a artistas locales en la transformación del Mirador en un espacio vibrante y lleno de vida.

La historia de la banca, según relata su creador, surge de un gesto simple pero significativo: el deseo de compartir un lugar de contemplación y descanso con la comunidad. Este pequeño acto de generosidad ha desencadenado una ola de entusiasmo y colaboración, que impulsa la realización de proyectos ambiciosos y la construcción de un futuro más prometedor para el río Sabinas y sus alrededores.

En un momento en el que la protección del medio ambiente es una prioridad urgente, ejemplos como este nos recuerdan el poder transformador de la acción individual y la importancia de la colaboración comunitaria. La banca en el río, la banca del Mirador no solo es un asiento físico, sino un símbolo de esperanza y un recordatorio de que cada pequeño esfuerzo contribuye al bienestar de nuestro entorno compartido.

DEJE SU COMENTARIO

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *