El quaterback obtiene el pago garantizado más grande en la historia de la NFL
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CIUDAD DE MÉXICO.- Los Buffalo Bills han cerrado un acuerdo histórico con su mariscal de campo estrella, Josh Allen, quien se convierte en el nuevo QB mejor pagado de la NFL. Este domingo, después de una serie de extensiones y aumentos salariales para varios jugadores de la liga, los Bills aseguraron al que es considerado la cara de la franquicia con una extensión de contrato que es un parteaguas en la historia de la NFL. El acuerdo de seis años por un total de 330 millones de dólares incluye 250 millones de dólares garantizados, la cifra más grande de su tipo en la historia de la liga hasta la fecha.
Este nuevo contrato supera el promedio anual de 43 millones de dólares que tenía en su contrato anterior. Con la renovación, la media anual se eleva a más de 60 millones de dólares, un incremento significativo que refleja no solo su impacto dentro del campo, sino también el compromiso de los Bills con el futuro del equipo. Aunque Allen todavía tenía cuatro años restantes en su contrato, la directiva de Buffalo ha decidido recompensar al quarterback por su destacada labor y por su liderazgo al frente del equipo.
«Hemos llegado a un acuerdo sobre un nuevo contrato con el quarterback MVP Josh Allen, que lo mantendrá en Buffalo hasta 2030», anunciaron los Buffalo Bills a través de sus redes sociales, generando una ola de entusiasmo entre los aficionados del equipo y los medios de comunicación.
De un reclutamiento incierto a estrella de la NFL
Josh Allen, de 28 años, llegó a la NFL como una apuesta arriesgada. A pesar de tener un brazo potente, su precisión fue cuestionada durante su tiempo en la Universidad de Wyoming, lo que generó dudas sobre su capacidad para triunfar en la liga profesional. Sin embargo, los Buffalo Bills decidieron apostar por él como su futuro mariscal de campo al seleccionarlo en la séptima posición del Draft de 2018, un movimiento que pronto demostraría ser visionario.
En sus primeras temporadas, Allen mostró una impresionante capacidad para desarrollar su juego, destacándose no solo por su fuerza física y su potente brazo, sino también por su capacidad de improvisación y su capacidad para realizar jugadas en momentos clave. En 2020, dio un gran salto en su rendimiento, convirtiéndose en uno de los quarterbacks más completos de la liga y llevando a los Bills a los playoffs con un récord impresionante. En 2021, fue reconocido con el premio al Jugador Más Valioso (MVP) de la NFL, consolidando su estatus como una de las figuras más importantes del fútbol americano actual.
Además de su talento dentro del campo, Allen ha demostrado ser un líder respetado en los vestidores, ganándose el cariño de sus compañeros y el reconocimiento de la afición. Su dedicación al equipo y su trabajo incansable lo han convertido en un referente no solo para los Bills, sino para toda la liga. Su capacidad para mantenerse calmado bajo presión y ejecutar jugadas clave en momentos de tensión es una de las características que más lo distingue.
Un futuro prometedor para Buffalo
La extensión de contrato de Allen llega en un momento crucial para los Bills, quienes están en busca de su primer campeonato del Super Bowl en más de 20 años. A pesar de la tremenda calidad de Allen en el campo, quien ha sido la pieza clave para llevar a Buffalo a la cima de la AFC, aún no ha logrado alcanzar la gran final de la NFL, quedándose a las puertas en varias ocasiones. Sin embargo, este contrato también refleja el firme compromiso de la franquicia con el objetivo de ganar el codiciado Trofeo Vince Lombardi.
Allen, quien ha sido un referente de consistencia y desempeño desde su llegada a la NFL, tendrá ahora la responsabilidad de llevar a los Buffalo Bills hacia la gloria definitiva. Con un equipo lleno de talento y bajo el liderazgo del quarterback, las expectativas son altas, y su renovación de contrato refuerza la idea de que la franquicia está construyendo una dinastía en ciernes.
Compromiso fuera del campo
Fuera del campo, Josh Allen también ha utilizado su plataforma para involucrarse en causas comunitarias, mostrando su compromiso con la ciudad de Buffalo y sus habitantes. Ha estado involucrado en varias iniciativas de beneficencia, contribuyendo con su tiempo y recursos a organizaciones locales que apoyan a jóvenes y familias en situación de vulnerabilidad. Su carisma y su conexión con los fanáticos de Buffalo lo han convertido en un ícono tanto dentro como fuera del terreno de juego.
El futuro de los Bills parece estar cada vez más claro, y la ambición de Allen de conseguir un Super Bowl para Buffalo sigue intacta. Esta histórica extensión, que le asegura un lugar importante en la historia de la liga, es solo el comienzo de lo que podría ser una de las eras más fructíferas en la historia reciente del fútbol americano.
