
Por/Factor
Colombia. – El presidente de Colombia, Gustavo Petro, confirmó ayer la participación de más de una decena de sus compatriotas en un atentado ocurrido hace una semana en Michoacán que dejó al menos ocho militares mexicanos muertos. De acuerdo con Petro, las personas formaron parte del Ejército de Colombia y estaban a sueldo del Cártel de Los Reyes, una organización criminal surgida hace una década como escisión de los grupos de autodefensa que en 2013 tomaron las armas contra Los Caballeros Templarios.
Petro calificó lo ocurrido de “traición a la patria” y apostó por imponer las penas más altas a aquellos ciudadanos que se convierten en mercenarios y venden “sus conocimientos militares” adquiridos gracias al dinero público. “Acaba de estallar una bomba contra el Ejército mexicano en Michoacán, con unos muertos ahí. El Ejército, en su acción, fue y capturó a los posibles autores del explosivo. La mayoría son exmilitares colombianos y hay algunos activos”, apuntó.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Colombia informó de que las 11 personas “recibirán la correspondiente atención consular” a la que tienen derecho. Las autoridades mexicanas confirmaron la detención por estos hechos de 17 personas, 11 de las cuales fueron identificadas como ciudadanos colombianos. Acaba de estallar una bomba contra el Ejército mexicano en Michoacán… El Ejército fue y capturó a los posibles autores del explosivo. La mayoría son exmilitares colombianos y hay algunos activos.” Gustavo Petro, presidente de Colombia.