Invitan a visitar el Museo de Villa
Por: Cristina Flores Cepeda
Sabinas, Coahuila. – A partir de las 10 de la mañana el museo de Francisco Villa en Sabinas, ubicado a una cuadra de la plaza principal por la calle Emilio Carranza, esquina con Gómez Farías mantiene abiertas sus puertas para quienes quieran visitarlo, dijo la profesora Bertha Alicia Villarreal Rodríguez, directora de este. El lugar cuenta con 7 salas y puede ingresar la ciudadanía en general de martes a domingo. El Museo Francisco Villa fue inaugurado en 2010 con motivo del centenario de la Revolución.
Anteriormente era conocido como “Casa Lamar”, por el apellido de quienes fueran sus propietarios; cuentan que Pancho Villa eligió llegar ahí porque la vivienda está junto a las vías del ferrocarril, donde tuvieron lugar las negociaciones para la firma del armisticio revolucionario. En este Museo se localizan artículos de la época de la Revolución y la historia del acontecimiento que sucedió en Sabinas en 1920 cuando eligió el caudillo este sitio para entenderse con el gobierno y entregar las armas y dedicarse a la vida civil. La historia nos dice que Pancho Villa llegó aquí un 26 de julio y estuvo, 26, 27 y 28. En este último se dio la firma del armisticio. Fue en esta casa donde se hospedó esos días en espera del resultado que trascendió más allá de nuestras fronteras.
Sus siete salas brindan una rica panorámica de la vida, lucha y legado de Villa. Comienza con los orígenes de Doroteo Arango, el verdadero nombre del Centauro del norte, su participación en las primeras etapas de la Revolución hasta la formación de la División del Norte y sus victorias decisivas en Zacatecas y en la Laguna. En seguida muestra las derrotas del Bajío en 1915 y la dura faceta de Villa como guerrillero en los años posteriores, hasta el armisticio de Sabinas en 1920. En la sala tres hay una proyección de una película donde Villa habla en primera persona como si Francisco Villa viviera y nos estuviera relatando algo de su existencia y su estancia en Sabinas. En otra más se localiza todo lo que hace referencia al armisticio y ahí hay otra exhibición de películas, así como el pendiente de sus traslados al ferrocarril que eran constantes para enviar información y recibirla.
Luego su traslado a la hacienda de Canutillo. La penúltima sala se encuentra dedicada a sus últimos años y su asesinato en Parral, Chihuahua, en 1923. El interesante cierre de este espacio se refiere a cómo Villa se transformó en uno de los grandes mitos mexicanos del siglo XX. En el lugar está el acta de nacimiento de Doroteo Arango conocido como Francisco o Pancho Villa, el Caudillo, el guerrillero, el hombre amante de la educación, aunque él era iletrado, pero consta en sus andares del apoyo que siempre brindó a los maestros al considerar que la educación era clave en el diario vivir.
