
Familias de Pasta De Conchos necesitan acompañamiento para sanar el dolor: Monseñor Alfonso Miranda
Luis Carmona
Factor
NUEVA ROSITA, COAH. – Las ceremonias luctuosas alusivas al décimo noveno aniversario del accidente minero en Pasta de Conchos fueron un claro ejemplo de la unión de un pueblo herido por el dolor de perder a un ser querido de forma trágica.
Lo anterior fue el mensaje del obispo de la diócesis de Piedras Negras, Alfonso Gerardo Miranda Guardiola al iniciar la misa para recordar la memoria de los 65 mineros que perecieron en las entrañas de la mina 8.
Monseñor tuvo la atención de atender a las familias y representantes de las secciones mineras del Sindicato Minero Nacional de Napoleón Gómez Urrutia quienes realizaron un memorial para recordar las hazañas realizadas a lo largo de diecinueve años para consolidar el rescate y recuperación de los mineros.
Al ingreso del altar y previo a la misa, mencionó que las familias de los mineros necesitan acompañamiento, porque el dolor tiene que ser respaldado por un solidario abrazo de la mano de Dios que será el bálsamo para el consuelo.
Reconoció el acercamiento de viudas para buscar sanación en la palabra del creador ahora que reavivan los sentimientos que hace diecinueve años quedaron atrapados en las fibras mas sensibles de las emociones de madres, esposas, hijos y parientes que todavía lloran por la tragedia minera que arrebató a sus seres queridos.
El decano y sacerdotes de la Región Carbonífera solicitaron la celebración litúrgica para convocar a la unión e invitar a la comunidad a formar parte de una sola voz con las familias para exigir justicia, verdad y seguridad en las minas.
Llamó a la comunidad en general a formar parte de una postura que una el esfuerza para no permitir injusticias en centros de trabajo como las minas y acabar con las tragedias que tanto dolor han causado por más de cien años a la Región Carbonífera.
