A lo largo del día, más de 161 mil 250 habitantes de Tijuana y Rosarito se quedaron sin energía por la caída de postes, árboles y cables, por lo que trabajadores de la CFE trabajan ininterrumpidamente para atender las llamadas de emergencia
Excelsior
BAJA CALIFORNIA.- El saldo de la tormenta invernal que asoló esta frontera a lo largo del martes fue de dos personas muertas y una desparecida; la primera al caerle encima la estructura del techo de un centro comercial en semi abandono, y la segunda cuando una mujer fue arrastrada por la corriente de agua en un fraccionamiento residencial hasta una boca de tormenta.
Una tercera víctima, al parecer un hombre, también arrastrado por las aguas, pero en una colonia marginal, se encuentra desaparecida.
A estos casos se suman numerosas caídas de árboles, apagones, inundaciones y carros arrastrados por las avenidas de agua hasta los tanques desarenadores, al punto en que la Dirección de Protección Civil registró vientos de más de 100 kilómetros en algunas áreas mientras que Bomberos de Tijuana reportaron 54 casos atendidos.
En la tragedia registrada en el Centro Comercial Otay, a las 14:15 de la tarde, agentes de la Policía Municipal y Bomberos atendieron la llamada de auxilio tras el desplome de un tramo de la estructura del techo en la zona de food court, donde 5 personas fueron rescatadas con lesiones mientras que el cuerpo de una mujer fue recuperado de entre los escombros y trasladado al Servicio Médico Forense.
«Lamentablemente sí hay una persona sin vida y estamos revisando por dónde van a entrar de manera segura (los elementos de Bomberos) para rescatar el cuerpo”, dijo el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Fernando Sánchez.
En otros hechos, una mujer fue arrastrada por la corriente en la calle Mérida de la colonia Chapultepec Hipódromo hasta una boca de tormenta donde se ahogó, y su cuerpo rescatado por la división Salvavidas de Bomberos de la ciudad.
Otras personas estuvieron a punto de morir al circular en sus vehículos por zonas donde la fuerza del agua era intensa, o al tratar de cruzar zonas inundadas.
A lo largo del día, más de 161 mil 250 habitantes de Tijuana y Rosarito se quedaron sin energía por la caída de postes, árboles y cables, por lo que trabajadores de la Comisión Federal de Electricidad trabajan ininterrumpidamente para atender las llamadas de emergencia.
