
Después de 19 años de la tragedia minera por fin hay cinco familias que recuperaron a sus mineros de Pasta de Conchos
Luis Carmona
Factor
NUEVA ROSITA, COAH. – En el décimo noveno aniversario luctuoso de la tragedia minera de Pasta de Conchos, familiares de los desparecidos mineros empezaron a ver los resultados de la lucha social que emprendieron para exigir la recuperación de sus restos.
Elizabeth Castillo Rábago informó que estaba contenta por sus compañeras que consolidaron su anhelo de regresar a casa en paz después de otorgar cristiana sepultura a sus mineros después de diecinueve largos años de espera.
“El tiempo nos dio la razón a nuestros mineros los dejaron morir y no hubo explosión, el hallazgo y recuperación de sus restos bilógicos es una prueba de la corrupción e impunidad que cometieron los dueños de la mina y las autoridades gubernamentales”.
En la actualidad cinco familias por fin tuvieron la dicha de haber recuperado a sus mineros y continuar apoyando la lucha social con el resto de los deudos, porque enfatizó que después de extraer al último minero vendrá el proceso legal para exigir un castigo en contra de los responsables del multihomicidio industrial.
Por casi dos décadas todas las viudas de Pasta de Conchos fuimos centro de burlas y mentiras por parte de autoridades gubernamentales que solo hacían circo en la mina para aparentar que trabajan en trabajos de rescate de los mineros y finalmente hoy se puede hablar de resultados y no de promesas.
Fueron organismos internacionales quienes por medio de una denuncia ante la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos que hubo la presión necesaria para que el gobierno hiciera posible el rescate y recuperación de los 63 mineros que en total han sido trece los restos biológicos avistados y siendo extraídos e identificados por el mando unificado del gobierno federal.
Hoy en el patio de la obra de recuperación habrá una misa a la doce del mediodía que oficiará el obispo de la diócesis de Piedras Negras Alfonso Gerardo Miranda Guardiola y la guardia con colocación de ofendas florales en el interior de la mina.
