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Seúl. – Corea del Norte ha afirmado, este lunes, que Corea del Sur ha infringido un acuerdo militar intercoreano de 2018 y otros tratados clave entre las dos Coreas, condenando los ejercicios militares conjuntos entre Seúl y Washington como un acto provocativo que viola tal pacto. La condena se produjo después de que el Norte prometió, la semana pasada, que reanudaría todas las medidas militares, suspendidas de conformidad con el tratado de 2018, y desplegaría nuevas armas en la frontera, en respuesta a la suspensión parcial de Seúl del acuerdo de reducción de tensión militar, debido al lanzamiento de Pyongyang de un satélite espía militar.
El Rodong Sinmun, el principal periódico de Corea del Norte dijo, el lunes, que Corea del Sur se ha estado aferrando a un plan para provocar una guerra contra el Norte, en colaboración con EE. UU. y Japón. Desde que las dos Coreas adoptaron el acuerdo militar de 2018, Corea del Sur «ha infringido violentamente los acuerdos intercoreanos y ha pisoteado, de manera constante, la paz y la estabilidad en la península coreana», según el periódico.
Corea del Norte dijo que Seúl y Washington llevaron a cabo, tan solo en el año pasado, unas 250 rondas de ejercicios militares conjuntos, al objeto de prepararse para ataques preventivos a Pyongyang, y realizaron tal tipo de «agresión de guerra» en casi 600 ocasiones, durante los cuatro últimos años. El Norte ha denunciado, desde hace mucho tiempo, los ejercicios militares Seúl-Washington como ensayos para una invasión.
El medio de comunicación norcoreano dijo que tal alboroto por «jugar con fuego» es la manifestación de un acto extremadamente provocativo y peligroso, que indica la violación del acuerdo militar entre las dos Coreas. El acuerdo militar de 2018 insta al establecimiento de zonas de amortiguamiento y zonas de exclusión aérea cerca de la frontera intercoreana, para prevenir enfrentamientos accidentales entre el Sur y el Norte. De conformidad con el tratado, las dos partes acordaron detener los ejercicios de artillería con fuego real y entrenamientos de campo a lo largo de la frontera. Sin embargo, el acuerdo no estipula la prohibición de ejercicios militares conjuntos entre Seúl y Washington.
Corea del Sur y EE. UU. han ampliado los ejercicios militares conjuntos a medida que Corea del Norte ha intensificado sus pruebas de armas, incluidos los misiles balísticos intercontinentales (ICBM, según sus siglas en inglés) de combustible sólido.
