Habitantes de la zona teme afectaciones en sus viviendas y animales; solicitan haya más apagafuegos para sofocar las llamas; sequía en la entidad ha sido favorable para el fuego
Abc Noticias
NUEVO LEON.- El incendio que se registra en la Sierra de Santiago ya consumió 800 hectáreas y pobladores de comunidades como Potrero Redondo temen por sus viviendas y animales.
Vecinos de Santiago con familiares en el lugar de los hechos piden a las autoridades reforzar las brigadas para contener el fuego y enviar ayuda a los pobladores.
El riesgo, dicen, es que llegue a las viviendas y se expanda aún más el fuego.
ABC Noticias entrevistó a Mayra Hernández, cuyos padres y hermana permanecen en Potrero Redondo, y pidió que se refuerce la presencia de apagafuegos y equipo para contención, ya que la labor de voluntarios y un helicóptero no es suficiente.
Hasta ahora, la versión oficial indica que el fuego está controlado sólo en un 35 por ciento.
“Que suba ayuda para que ayuden (sic) a sofocarlo porque hay viviendas muy cerca del bosque, que si llega ahí no va a quedar prácticamente nada”, señaló preocupada Mayra.
Afirmó que, tras contactar a su hermana, tuvo conocimiento de que el fuego ya había alcanzado a unas vacas y la propiedad de su padre también habría sido afectada.
Una necesidad que enfrentan los habitantes del lugar, señaló Mayra Hernández, es que algunas personas que se quedaron requieren víveres y medicamentos.
Hasta ahora, el incendio forestal mantiene su avance hacia Lagunillas y La Camotera, donde las brigadas llevaron a cabo trabajo para reforzar líneas de contención.
En un boletín, Protección Civil del Estado informó que “hoy (ayer) se registraron condiciones meteorológicas que no fueron favorables para el ataque aéreo y por algunos lapsos, obligaron a replegar las brigadas para salvaguardar a los combatientes”.
Al cierre de la jornada, se tiene una afectación de 800 hectáreas con un porcentaje de control de 35 por ciento. El incendio provoca acumulación de denso humo y caída de ceniza por la dirección de viento hacia Laguna de Sánchez, en Santiago.
El fuego ha avanzado de manera rápida, pues el reporte del sábado indicaba una devastación de 450 hectáreas, cifra que creció 78 por ciento en 24 horas.
La fuerte sequía que golpea a Nuevo León ha sido factor detonante de incendios y de su rápido avance. De acuerdo con Conagua, el 62 por ciento del Estado presenta algún tipo de afectación por este fenómeno.
