Héctor Herrera
Factor
Saltillo Coahuila. A solo unas semanas de que concluya la administración federal, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) ha anunciado un nuevo recorte al presupuesto, generando preocupación en varias entidades del país, incluyendo Coahuila. Ante esta situación, el gobernador de Coahuila, Manolo Jiménez Salinas, manifestó su inquietud sobre las implicaciones que tendrá esta medida en el Estado, señalando que el impacto podría ser significativo.
«Este nuevo recorte presupuestal nos hace un daño importante», subrayó Jiménez Salinas. Aunque aún no se ha definido con precisión el alcance del recorte para Coahuila, el gobernador indicó que en los próximos días se determinará cómo afectará directamente a la entidad. «Estamos trabajando para entender la magnitud de este ajuste y cómo mitigarlo, pero es innegable que la merma en los recursos tendrá repercusiones en varios sectores clave de nuestro Estado», añadió.
Jiménez Salinas también aprovechó para hacer un llamado a las autoridades federales entrantes, destacando la necesidad de que, en caso de que estos recortes presupuestales continúen en el próximo sexenio, el gobierno federal compense a Coahuila con inversiones en infraestructura, salud, educación y seguridad. «Si los recortes son inevitables, entonces exigimos que nos compensen con obras y servicios que beneficien directamente a la población de Coahuila. No podemos permitir que nuestros ciudadanos sufran las consecuencias de decisiones que se toman sin considerar el impacto local», enfatizó el gobernador.
El anuncio de la SHCP llega en un momento crítico para la planeación y ejecución de proyectos estatales. La administración de Jiménez Salinas se ha enfocado en impulsar el desarrollo de Coahuila a través de iniciativas en infraestructura, mejoramiento de los servicios de salud y educación, así como el fortalecimiento de la seguridad pública. Sin embargo, estos esfuerzos podrían verse comprometidos si los recursos federales se reducen de manera considerable.
A pesar de la incertidumbre, el gobernador expresó su compromiso de continuar trabajando en beneficio de los coahuilenses y de buscar alternativas para compensar los recortes que se avecinan. «No nos quedaremos de brazos cruzados. Vamos a luchar por lo que le corresponde a Coahuila y a buscar soluciones que nos permitan seguir avanzando», concluyó Jiménez Salinas.
En los próximos días, el gobierno estatal seguirá evaluando el impacto del recorte y determinará las estrategias necesarias para enfrentar los desafíos financieros que podrían derivarse de esta medida. Mientras tanto, la expectativa y preocupación entre los sectores afectados continúa creciendo, a la espera de un plan de acción que permita mitigar las posibles consecuencias negativas para el estado.
