
Por/factor
Chile. – Al tiempo que Chile vuelve a la normalidad, aumentan las interrogantes sobre el masivo apagón que dejó el martes (25.02.25) al 95% de la población sin suministro eléctrico por varias horas. El país se vio afectado en una extensión de más de tres mil kilómetros por esta situación, que llevó al gobierno a decretar estado de catástrofe e imponer toque de queda durante la noche.
El corte del servicio, el mayor en más de una década ocurrió sorpresivamente pasadas las 15.00 hrs., hora local, en medio de las altas temperaturas veraniegas, y generó una serie de impactos, desde la evacuación del metro de Santiago, caos en el tránsito, problemas en la cobertura de telefonía móvil y suspensión de clases, hasta la interrupción de faenas mineras e industriales.
El suministro comenzó a ser restablecido por sectores, pero hasta entrada la noche una parte del país seguía a oscuras. Esta mañana se había normalizado el suministro para más del 97% de los hogares y fue levantado el estado de excepción. Los organismos regulatorios comenzarán las investigaciones para determinar responsabilidades. «Lo ocurrido hoy nos indigna. No es tolerable que por responsabilidad de una o de varias empresas se afecte la vida cotidiana de millones de personas”, señaló el presidente Gabriel Boric.
En Chile, el servicio eléctrico está en manos de empresas privadas y el Coordinador Eléctrico Nacional (CEN), un organismo público autónomo, técnico e independiente, es el encargado de coordinar la operación del sistema. Este episodio pone en cuestionamiento cuán vulnerable es la red eléctrica chilena.
«Los sistemas eléctricos no son infalibles, pero se diseñan de manera que, si fallan, la propagación sea la mínima posible, las desconexiones de consumo ocurran en zonas específicas y la recuperación del servicio sea en el menor tiempo posible”, explica a DW Carlos Barría, director de la consultora especializada en el mercado eléctrico chileno Grid & Zero Energy Consulting. En este caso, los tres ejes de la seguridad del servicio mostraron problemas.