Por/Factor
Estados Unidos. – Donald Trump, presidente de los Estados Unidos, convirtió en bandera política la captura de un presunto líder de la MS-13, despliegue que incluyó elogios públicos a su equipo de seguridad y reforzó su narrativa de mano dura contra el crimen organizado transnacional. A través de Truth Social, Trump celebró el operativo en Woodbridge (Virginia), donde fue detenido un salvadoreño indocumentado señalado como uno de los tres máximos cabecillas de la pandilla en Estados Unidos.
«Acaba de ser capturado un líder importante de MS13. ¡Tom Homan es una superestrella!», escribió el mandatario, refiriéndose a su asesor fronterizo. En otro mensaje, destacó la labor conjunta de la fiscal general Pam Bondi, el director del FBI Kash Patel y la secretaria de Seguridad Nacional Kristi Noem: «¡Es algo muy importante!». El arresto realizado al amanecer por equipos del FBI, ICE y policía estatal ocurrió en una vivienda con cinco menores presentes. Bondi describió al detenido como un «terrorista» vinculado a crímenes violentos, aunque omitió su identidad “por razones operativas”. La fiscal enfatizó que el individuo, de 24 años y origen salvadoreño, «vivía a 30 minutos de Washington D.C.» como inmigrante irregular.
La portavoz presidencial Karoline Leavitt calificó la acción como «una gran victoria para el público estadounidense», añadiendo que “nuestras comunidades son más seguras esta mañana”. El caso fue instrumentalizado para criticar administraciones pasadas. Bondi acusó a la era Biden de permitir «fronteras abiertas» que facilitaron el ingreso de criminales, mientras el gobernador republicano de Virginia, Glenn Youngkin, aprovechó para rechazar políticas santuario.
Trump, en tanto, consolidó su relato antimigración al destacar la participación de Homan y de Noem, quien coordinó desde Colombia la deportación de otros pandilleros a El Salvador.
