El mercado de pases en el futbol europeo está a todo lo que da. Cifras millonarias y clubes que buscan contratar a nuevos futbolistas para mejorar su plantilla.
Cifras estratosféricas las que se manejan en algunos países, como en Inglaterra.
Y dentro de todo este movimiento hay varios futbolistas mexicanos que en este momento no saben dónde estarán a partir de la próxima campaña que arranca en agosto.
Lo de Orbelín Pineda es de aplaudir porque después de ir al Celta de Vigo y no tener oportunidades se fue al futbol de Grecia donde fue nombrado el mejor jugador del torneo y además su AEK ya ejerció la opción de compra.
Santiago Giménez, que también tuvo una campaña brillante, todavía no decide si seguir en Holanda un año mas o cambiar a una liga mas competitiva que la holandesa.
Lo de Chucky Lozano preocupa porque, a pesar de ser campeón de la serie A con Nápoles, lo quieren vender y lo han puesto en el mercado. Ademas, se recupera apenas de una lesión.
Jesús Manuel Corona, que se pasó todo el torneo con serios problemas de lesión, esta transferible, al igual que todos sus compañeros. Todo el Sevilla se vende por bajo rendimiento.
César Montes, que descendió con el Español, causó una grata impresión y podría seguir su carrera en primera con un equipo diferente.
Raúl Jimenez no tiene idea de dónde jugará. Raúl paso de ser uno de los mejores delanteros de Europa a uno más, después de su gravísima fractura.
Gerardo Arteaga ya tiene ganas de subir a una liga mas competitiva, pero todavía no hay interés serio de ningún otro equipo.
En pocas palabras, lo que viene para casi todos los mexicanos que están en el viejo continente parece será complicado. Edson Álvarez ya estaba en el Borussia y la negociación se perdió.
O Erik Gutiérrez, quien se cansó de Holanda y regresará para jugar en Chivas.
Gutiérrez, Pizzuto, Lainez y varios más regresan a casa con más pena que gloria.
Muchas dudas sobre los mexicanos que juegan en el primer mundo del futbol. Lamentablemente.
Lo que viene.
