
Vianey Rico Cortez; la sabinense que no se vence
-Ganó el primer lugar del concurso de contraloría social en Coahuila y el segundo a nivel nacional
– “Señales contrapunteadas”
Por: Cristina Flores Cepeda
Sabinas, Coahuila. – No hay imposibles, el límite es el infinito y si usted tiene alguna duda, basta con ver a Vianey Rico Cortez, la sabinense que no se vence pese a las adversidades que ella toma como lecciones de vida. Invidente a raíz que fue prematura y permaneció dos meses en incubadora sin la protección en los ojos, Vianey ha enfrentado siempre con optimismo cualquier situación que se le presenta, es profesionista, licenciada en psicología y recientemente galardonada con el premio Estatal de contraloría social en primer lugar con “Señales contrapunteadas”. Esto le brindó la oportunidad de representar a Coahuila en la XV Edición del Premio de Contraloría Social 2023, donde obtuvo el segundo lugar a nivel nacional. En este mismo rubro entrevistada por periódico Factor consideró que, si te lo propones, nada es imposible.
Mencionó la grave problemática que se tiene en materia de suicidios y envió un mensaje en el sentido que todos debemos tener en cuenta varias cosas, pero una muy importante es que uno nunca, nadie está solo y a nadie la vida le envía más peso del que puede levantar, porque la felicidad no depende de alguien más sino de ti mismo. “No le puedes dar a nadie el poder de decidir en tu vida, debes tomar las riendas de ella para dirigirte a donde tú quieras, siempre desde luego contando con el respaldo de tu familia, de amigos, de quién más confianza le tengas pero, siempre apoyarte para salir adelante, todo se puede”.
En cuanto a su premio señaló que atendió un llamado de la Secretaría de Fiscalización y Rendición de Cuentas (SEFIRC), el cual consistió en proyectos que permitan impulsar algún sector de la comunidad para mejorarlo, su proyecto consistió en la inclusión porque siempre desde niña “ese ha sido mi estandarte en todos los aspectos por lo que yo vivo; lo que pedimos a las instituciones tanto gubernamentales como no gubernamentales, es que incluyan el lenguaje de señas, el sistema braille, la audio descripción, tal vez pictogramas y aquello que permita involucrarse a todas las personas con alguna discapacidad tanto intelectual y/ o cognitiva en cada cosa que ellos saquen y salió premiado. El 15 de noviembre en San Carlos, Sonora, recibí este galardón y estoy muy contenta porque ha sido una lucha de mucho tiempo y es bueno que se extienda y que impacte más allá del Estado”.
Aceptó que ha resentido el tema de exclusión principalmente en el tema de la educación y, al momento de laborar, hay veces que la gente no se da cuenta o, la misma política de las empresas no se percatan que el hecho de ser una persona con discapacidad visual, que es el caso en particular, “no me impide dar lo que se ocupa”. Dijo que su crecimiento académico ha sido maravilloso porque tuvo la oportunidad de cursar la carrera de psicología; “fue una instrucción llena de retos pero que me ha dejado crecimientos no solo en conocimientos profesionales, sino de la vida, también aprendes muchísimo sobre la sociedad en que vivimos hoy y, aunque hemos avanzado mucho en la inclusión también es necesario reconocer que falta mucho pero, como yo les digo siempre, vamos a paso lento, pero seguro”.
Citó dos momentos especiales en su vida uno de ellos fue cuando quiso ingresar a la secundaria que presentó el examen a una de muy alta demanda y sí pasó la prueba con excelente calificación, pero no le gustó como la trataron. “Al momento de presentar el examen sé que no están preparados, pero una cosa es esa y otra es el trato; posteriormente en la preparatoria al querer ingresar a la que tenemos aquí en la ciudad de 3 años, que es técnica, de repente el director me aborda y me dice que no compre la ficha porque no voy a entrar, la excusa fue que no había maestros para atenderme”.
En ese momento ingresó a una preparatoria de dos años particular donde hizo también su carrera que es en la UANE; “han sido cosas que han representado un antes y un después en mi vida y son clave para la lucha que vivo día a día”. Vianey Rico Cortez presenta ceguera a causa de que fue prematura, de 7 meses y estuvo dos meses en la incubadora pero no se le puso el antifaz o el protector y eso le dañó el nervio óptico. Reconoció que siempre ha contado con una aliada incondicional que es su madre la señora Alma Cortez. Ella siempre anda conmigo a todas partes y hemos vivido infinidad de cosas juntas; nunca me ha dejado y siempre les he dicho a los padres de familia con los cuales he trabajado con niños especiales, que sus hijos, pueden llegar tan lejos como ellos quieran porque todo depende de los padres, del apoyo, que tengas esa confianza que vas a lograr avanzar en la vida de la mano de la gente que te quiere, esa es la magnitud de lo que vas a lograr, porque el pilar son los padres, la familia”.