
Parroquia San Francisco de Asís celebra 9o aniversario con fe, oración y comunión
Por: Cristina Flores Cepeda
Sabinas, Coahuila. – En un ambiente de espiritualidad y fervor religioso, la Parroquia San Francisco de Asís celebró esta semana una serie de actividades litúrgicas y pastorales que culminan con el noveno aniversario de su fundación como parroquia, según lo informó el párroco Mariano Carrillo Alva. Como parte de esta intensa jornada de fe, el miércoles se vivió uno de los momentos más significativos, con la confirmación de los niños por parte del obispo de la diócesis de Piedras Negras, Alfonso Gerardo Miranda Guardiola, quien impartió el sacramento acompañado de la comunidad parroquial, familiares y padrinos.
El jueves, continuaron las actividades con una reunión de decanato, espacio de coordinación entre las parroquias del sector, y por la tarde, se celebró la Solemnidad del Cuerpo y la Sangre de Cristo, festividad central en la vida litúrgica de la Iglesia, que recuerda la presencia real de Jesucristo en la Eucaristía. El viernes, la parroquia se unió al novenario del Sagrado Corazón, realizando una peregrinación hacia la parroquia del Sagrado Corazón de Jesús en Sabinas, donde los fieles cruzaron la Puerta Santa y participaron en la Santa Misa como signo de comunión entre comunidades. El sábado, los feligreses de San Francisco de Asís acompañaron a la comunidad de la parroquia en la celebración al Sagrado Corazón como su patrono, fortaleciendo así la hermandad entre las diferentes comunidades parroquiales.
El padre Mariano Carrillo resaltó que esta semana ha sido de intensa actividad espiritual, en la que los fieles han podido vivir y compartir los signos del amor de Dios. Las festividades continúan con la celebración patronal de la Capilla San Pablo, ubicada en la colonia Vista Hermosa, la cual conmemora a los apóstoles Pedro y Pablo el domingo 29. En su mensaje a la comunidad, el párroco reflexionó sobre la necesidad de construir la paz, especialmente en un mundo marcado por la guerra, el egoísmo y la injusticia. “Acabamos de concluir el tiempo de Pascua con la fiesta de Pentecostés, donde celebramos la alegría de Cristo resucitado. Lo primero que Él ofrece a sus discípulos después de vencer la muerte y el pecado es la paz. Esa paz es el primer fruto de la resurrección, y como Iglesia, estamos llamados a vivirla y compartirla”, expresó.
Hizo un llamado a la oración, invitando a todos a pedir a Dios para que esa paz alcance el corazón de quienes tienen en sus manos el poder de tomar decisiones que afectan a toda la humanidad. “Necesitamos líderes que actúen no por interés personal, sino por el bien común, por la humanidad entera. Por eso, debemos invocar al Señor para que su Espíritu toque sus corazones y reine la paz en nuestro mundo”, concluyó.
