
Operativo Abrigo protege a los más vulnerables en la Región Carbonífera
Por: Cristina Flores Cepeda
Región Carbonífera, Coah. – Las inclemencias del tiempo han llegado con fuerza a la Región Carbonífera, y con ellas, el llamado a la solidaridad. En un esfuerzo conjunto y coordinado, los cuerpos de socorro, la Cruz Roja, Bomberos, Protección Civil y las corporaciones policiacas han activado el Operativo Abrigo, una medida diseñada para proteger a las personas en situación de vulnerabilidad durante esta temporada de frío extremo.
El mensaje es claro: si alguien conoce o detecta a una persona que necesite resguardo, basta con realizar una llamada al 911 o contactar directamente a las dependencias involucradas. Este sencillo acto puede marcar la diferencia entre la seguridad y el peligro, entre la calidez de un refugio y la crudeza de las temperaturas gélidas.
El Operativo Abrigo no distingue municipios ni límites; su alcance abarca Sabinas, San Juan de Sabinas, Múzquiz, Progreso y Juárez, donde albergues han sido habilitados para brindar techo, abrigo y alimento a quienes más lo necesitan. Estas instalaciones están listas para recibir a personas en situación de calle, familias que carecen de recursos para enfrentar el frío e incluso migrantes que transitan por la región.
Los cuerpos de socorro, siempre atentos, recorren calles y colonias para identificar a quienes puedan estar en riesgo. Protección Civil, en coordinación con los gobiernos municipales, supervisa que los albergues cumplan con las condiciones necesarias para ofrecer un espacio seguro y digno. Mientras tanto, la Cruz Roja y los Bomberos trabajan de la mano para brindar la asistencia necesaria. Más allá de las instituciones, este operativo depende también de la sensibilidad y el compromiso de la ciudadanía. «No podemos hacerlo solos», expresaron voluntarios de los cuerpos de socorro. «Cada llamada, cada aviso que nos dan, es una oportunidad más para salvar a alguien».
La invitación no se limita al reporte de casos, también se extiende a quienes deseen donar cobijas, ropa de invierno o alimentos no perecederos que serán distribuidos en los albergues. Este gesto puede ser una muestra de que, incluso en los momentos más fríos, la calidez humana prevalece. Detrás de cada traslado a un albergue hay historias que conmueven y recuerdan la importancia de este operativo. Desde un adulto mayor encontrado en una banca del parque hasta una familia migrante que, después de semanas de adversidades, finalmente encontró un lugar seguro, cada caso refleja la esencia de la humanidad: cuidar unos de otros.
El Operativo Abrigo es más que una respuesta ante el frío; es un recordatorio de que, en la Región Carbonífera, nadie está solo. Frente a las adversidades, somos una comunidad unida por la empatía, el esfuerzo y la voluntad de proteger la vida. Hoy más que nunca, el llamado es a sumar esfuerzos y tender la mano. Una llamada, un aviso, puede ser el primer paso para llevar esperanza y calor a quienes más lo necesitan. En este invierno, seamos la llama que encienda corazones y salve vidas.