FACTOR
GUATEMALA.– En una noche histórica para el fútbol guatemalteco, Luis Fernando Tena, el técnico mexicano que hizo campeón olímpico a México en 2012, ha vuelto a escribir su nombre con letras doradas en la historia del fútbol internacional. Esta vez, no fue con su país natal, sino con Guatemala, una selección que ha encontrado en el ‘Flaco’ no solo a un entrenador, sino a un líder que ha devuelto la ilusión a toda una nación.
La victoria de Guatemala sobre Canadá en penales (1(6)-(5)1) en los cuartos de final de la Copa Oro 2025 representa, para muchos, el triunfo más importante del fútbol guatemalteco en la era moderna, y consolida a Tena como una figura histórica en dos países. Mientras en México su legado fue subestimado, en Guatemala lo han arropado como uno de los suyos.
El oro que no bastó: Londres 2012 y el olvido mexicano
Luis Fernando Tena es el arquitecto de uno de los mayores logros del fútbol mexicano: la medalla de oro olímpica en Londres 2012, una hazaña conseguida al vencer 2-1 a Brasil en Wembley, con una brillante actuación de Oribe Peralta y una generación que incluyó a figuras como Héctor Herrera, Diego Reyes y Jesús Corona. Fue un logro que puso a México en los ojos del mundo.
Sin embargo, la recompensa institucional no estuvo a la altura del mérito. Tras la salida de José Manuel ‘Chepo’ de la Torre en 2013, en plena crisis rumbo al Mundial de Brasil 2014, Tena fue nombrado técnico interino del Tri, pero solo le permitieron dirigir un partido, una derrota 2-0 ante Estados Unidos. Pese a su pedigrí como entrenador olímpico campeón, fue desplazado rápidamente por Víctor Manuel Vucetich y luego, de forma definitiva, por Miguel Herrera.
“Nunca creyeron en mí para un proceso completo”, confesó Tena en una reciente entrevista, evidenciando que la herida sigue abierta. La FEMEXFUT nunca le ofreció el respaldo que merecía para liderar un ciclo mundialista.
Guatemala lo entendió: un nuevo hogar, una nueva misión
Tras años de altibajos en clubes y sin una nueva oportunidad con México, Luis Fernando Tena encontró un nuevo proyecto en Guatemala, país que desde 1967 no conocía un éxito regional destacado y que jamás ha clasificado a una Copa del Mundo.
Desde su llegada el 9 de diciembre de 2021, el técnico mexicano ha transformado la mentalidad y el estilo de juego del combinado chapín. Con orden táctico, paciencia estratégica y una visión de largo plazo, Guatemala ha ido creciendo hasta llegar a este momento histórico en la Copa Oro 2025.
El pase a semifinales marca un antes y un después. Tena no solo ha igualado la mejor participación de Guatemala en el torneo (la cuarta posición en 1996), sino que ha despertado una ola de optimismo y pertenencia en un país que llevaba décadas esperando por un referente futbolístico real.
El destino podría reunirlo con su sombra: Miguel Herrera
Guatemala ahora espera al ganador del duelo entre Estados Unidos y Costa Rica. En caso de que los ticos avancen, Luis Fernando Tena se medirá a Miguel Herrera, el técnico que finalmente fue elegido para dirigir a México en el Mundial de Brasil 2014 —el lugar que muchos pensaban que le correspondía al ‘Flaco’.
Ese posible reencuentro encierra una carga simbólica potente: el estratega olvidado por México, guiando a Guatemala a una final continental, enfrentando a quien tomó su lugar hace más de una década.
De olvidado a símbolo continental
Luis Fernando Tena se ha convertido en símbolo de resiliencia, dignidad y renacimiento futbolístico. México lo celebró cuando ganó el oro, pero lo ignoró después. Guatemala, en cambio, le ha dado un lugar de pertenencia, respeto y gratitud.
Hoy, la historia le sonríe al ‘Flaco’. Porque mientras en su tierra fue relegado, en Centroamérica lo han convertido en leyenda.
