Agencia Notimex/FACTOR
Madrid.?En la d?cima sesi?n del hist?rico juicio en el Tribunal Supremo (TS) contra los dirigentes del independentismo catal?n que llevaron a cabo la declaraci?n unilateral de secesi?n de octubre del 2017 hubo dos testigos cruciales para el desarrollo del proceso. Y ambos en representaci?n del Estado espa?ol y como m?ximos responsables de la seguridad en los d?as m?s tensos del conflicto. Los dos se?alaron al gobierno auton?mico catal?n, presidido entonces por Carles Puigdemont -fugado en B?lgica desde hace m?s de un a?o- y a la polic?a auton?mica de no cumplir el mandato judicial y de intentar impedir el operativo ordenado por la magistrada para evitar la celebraci?n del referendo del 1 de octubre.
Enric Millo, dirigente del derechista Partido Popular (PP) en Catalu?a era el delegado del gobierno en la regi?n en octubre del 2017. Fung?a como el enlace del gobierno espa?ol, entonces presidido por Mariano Rajoy, con las instituciones catalanes, adem?s de fungir como m?xima autoridad del aparato burocr?tico desplegado en la regi?n y que depend?a de instituciones centrales. Millo fue adem?s uno de los hombres que particip? en pr?cticamente todas las reuniones importantes entre ambas administraciones en los meses previos a la celebraci?n del referendo y a la posterior declaraci?n unilateral de independencia.
En su comparecencia como testigo, Millo explic? que durante aquellos meses tantos los funcionarios del Estado como los m?s de seis mil agentes espa?oles desplegados en Catalu?a para impedir la celebraci?n de la consulta ciudadano sufrieron todo tipo de ?acoso, hostigamiento y violencia?, al tiempo que defendi? la supuesta ?proporcionalidad? del operativo policial del d?a del referendo, que provoc? m?s de mil personas atendidas por los servicios sanitarios, la mayor?a de ellas por crisis nerviosas.
Millo se?al? que la supuesta violencia contra la polic?a espa?ola por parte de independentistas tuvo sus momentos m?s ?lgidos en las jornadas del 19 y el 20 de septiembre -cuando se llevaron a cabo varios registros policiales en instituciones catalanes-, el 1 de octubre y los d?as posteriores a esa fecha, una vez que los agentes desplegados habr?an sufrido todo tipo de insultos y vejaciones por parte de grupos de separatistas que se congregaron a las puertas de sus hoteles. En la versi?n del ex delegado del gobierno espa?ol tambi?n se acusa a la Generalitat y a los altos mandos de los Mossos d?Esquadra de no hacer nada para impedir estas agresiones y de llevar a cabo un plan para obstruir las actuaciones desarrollas por la Polic?a Nacional y la Guardia Civil. Incluso se?al? varios informes en los que se registr? el espionaje por parte de la polic?a auton?mica a los agentes espa?oles.
El otro testigo clave del d?a fue el coronel de la Guardia Civil Diego P?rez de los Cobos, quien fue designado como coordinador del operativo policial del 1 de octubre, centr? la mayor?a de sus reproches a la supuesta pasividad y obstruccionismo de la polic?a catalana para cumplir el mandato judicial, que les instaba a impedir la celebraci?n del referendo. Y que fue durante la jornada de votaci?n cuando constataron que los 16 mil agentes de los Mossos estaban realizando labores est?riles en t?rminos operativos y que en ning?n caso auxiliaron a los agentes espa?oles cuando sufrieron ataques por parte de grupos de independentistas. ?El dispositivo de los Mossos era manifiestamente insuficiente. No hab?a duda que los Mossos no imped?an el refer?ndum y por lo tanto deb?amos actuar?, explic?. Incluso relat? varios episodios en los que hubo ?violencia grave?, como aquel en el que un agente antidisturbios fue atacado por varias personas cuando se encontraba en el suelo y le propinaron varias patadas en la cabeza. ?Nos encontramos ante grupos de resistencia perfectamente organizados. De hecho colocaron a ni?os y personas mayores en la vanguardia de las murallas humanas?, a?adi?.
