By:Me
Habr? pa?s del mundo en que las celebraciones del D?a de Muertos sean tan coloridas como en M?xico? Y, ?habr? pa?s donde las fiestas de la Navidad sean tan entra?ables como las nuestras? Con semejante devoci?n e igual fervor de pueblo los mexicanos festejamos a la muerte y a la vida. Con la misma unci?n ponemos el altar de muertos y el nacimiento navide?o. En noviembre es la amarilla flor de cempas?chil; en diciembre la roja flor de Nochebuena. Flores nuestras las? dos; las dos flores mexicanas. Pronto dar?n principio las posadas. Aparte de nosotros no hay quien tenga ese rito jubiloso, los nueve d?as de fiesta que anteceden a la gran fiesta de la Navidad. Nadie m?s tiene la pi?ata y los antiguos cantos de pedir y dar posada, y las letrillas navide?as de Sor Juana y Pellicer. No hay quien posea la riqueza de Navidad de M?xico. Con ego?smo propio de los muchos a?os digo ahora que nadie disfruta m?s la Navidad que los ni?os y los viejos. Ellos porque acaban de salir de las manos de Dios; nosotros porque ya vamos a sus brazos. Pronto cantar? a Jes?s Mar?a y Jos?: «Eeen nombre del cielo Ooos pido posada…» (AFA) «Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz a.los que gozan de su buena.voluntad» Lucas 2:14 -Para sonre?r: ) Manolo y Venancio est?n colocando el ?rbol de navidad. -Venancio que voy a encender las luces dime si funcionan. -Ahora s?….ahora no….ahora s?…..ahora no… Disfrutemos estos hermosos d?as. Esperando el milagro de un nuevo renacer del ni?o Dios.