
Al hallazgo de una camioneta abandonada con rastros de sangre en el exterior e interior de esta se creía que había un ejecutado al interior, afortunadamente no fue así.
Con indicios de sangre y en estado de abandono dentro de un arroyo al oriente de Saltillo, se encontró una camioneta Voyager de color blanco durante la mañana de este domingo.
Este hallazgo generó una intensa movilización por parte de los elementos de la Policía Municipal, ya que existía la preocupación de que los ocupantes hubieran sido objeto de un ataque, con la posibilidad de que hubiera un individuo fallecido en su interior, al inspeccionar la unidad, solo se halló un gafete a nombre de “Ignacio Martínez”, y hasta el momento se desconoce el paradero del propietario.
Elementos de seguridad se dirigieron a la calle 12, donde se localizó el vehículo con manchas de sangre en la parte delantera, así como en el tablero interior y al no encontrar a ninguna persona en las cercanías, se procedió a asegurar el vehículo y trasladarlo a un corralón municipal.
Las autoridades presumen que podría tratarse de un accidente, ya que al ingresar a un terreno baldío que conecta Mira Sierra con Ignacio Zaragoza, el conductor se quedó sin camino.
En el momento del percance, el conductor o su acompañante golpearon el parabrisas frontal y, aún y con lesiones, abandonaron el lugar.