FACTOR
EL ALTO, BOLIVIA.– En un partido cargado de intensidad, emociones y altitud, la selección boliviana venció por 2-0 a Chile en la jornada 16 de las Eliminatorias Sudamericanas rumbo al Mundial de 2026. Con este resultado, La Verde mantiene vivas sus esperanzas de alcanzar al menos el repechaje, mientras que La Roja se despide prematuramente de la cita mundialista, en un nuevo episodio de su prolongada crisis futbolística.
Los goles del conjunto boliviano llegaron en momentos clave y fueron suficientes para sellar una victoria que reaviva la ilusión de volver a disputar una Copa del Mundo después de más de tres décadas. Bolivia alcanzó los 17 puntos en la tabla de posiciones y se coloca a solo uno de Venezuela (18), que ocupa el séptimo lugar, el cual otorga el boleto al repechaje intercontinental. La Vinotinto, sin embargo, aún debe enfrentarse esta noche a Uruguay, que marcha quinta con 21 unidades, en Montevideo.
El adiós de Chile y el declive de una generación dorada
La derrota dejó a Chile hundido en el fondo de la clasificación con apenas 10 puntos, fuera del Mundial por tercera edición consecutiva. Se convierte, además, en la primera selección sudamericana en quedar oficialmente eliminada del proceso rumbo a Norteamérica 2026. La era de Ricardo Gareca al frente del combinado chileno parece tener los días contados, ya que los resultados no han acompañado al técnico argentino desde su llegada.
La Roja, carente de identidad y sin el recambio generacional esperado, echó de menos figuras emblemáticas como Arturo Vidal, Gary Medel y Erick Pulgar. La sombra de la gloriosa generación bicampeona de América (2015 y 2016) parece pesar más que nunca, mientras el fútbol chileno atraviesa uno de sus momentos más complejos del último siglo.
La altura fue protagonista
Como ya es costumbre en El Alto, el factor físico volvió a ser determinante. A 4.150 metros sobre el nivel del mar, en el Estadio Municipal de Villa Ingenio, Bolivia impuso condiciones desde el arranque. El técnico interino Óscar Villegas –quien asumió tras la salida de Antonio Carlos Zago– planteó un partido agresivo, de presión alta y vértigo constante. La propuesta sofocó a un equipo chileno visiblemente incómodo, sin respuestas futbolísticas ni físicas.
El juego, marcado por la desesperación de ambas selecciones por sumar puntos vitales, tuvo pasajes tensos y momentos de fricción. Pero fue Bolivia la que mostró mayor convicción, energía y claridad táctica, logrando capitalizar las oportunidades y manejando los tiempos con inteligencia.
Lo que viene: dos fechas a todo o nada
Con Argentina ya clasificada, las últimas dos jornadas de las Eliminatorias Sudamericanas, programadas para septiembre, definirán los seis boletos directos y el lugar de repechaje para la Copa del Mundo de 2026, que se disputará en Estados Unidos, México y Canadá.
Bolivia visitará a Colombia en Barranquilla, en un duelo de alta exigencia, y cerrará como local frente a Brasil, en otro desafío mayúsculo. Por su parte, Chile, ya eliminado, se enfrentará a Brasil en calidad de visitante y luego recibirá a Uruguay en Santiago, partidos que podrían marcar el fin de ciclo de varios nombres históricos.
El sueño boliviano, más vivo que nunca
El recuerdo de 1994, la única clasificación mundialista de Bolivia en la era moderna, vuelve a rondar la mente de los hinchas. Con un plantel joven y motivado, y a pesar de un camino lleno de altibajos, La Verde quiere volver a hacer historia. Por ahora, mantiene el sueño intacto. Y eso, en unas eliminatorias tan impredecibles como estas, ya es mucho decir.
