Iv?n Garza Garc?a
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La abolici?n del neoliberalismo
Para quienes a?n no hayan recibido la noticia, se les informa que el modelo econ?mico neoliberal y sus pol?ticas, han quedado oficialmente abolidas en nuestro pa?s. Al menos, as? lo dio a conocer Andr?s Manuel L?pez Obrador, al concluir los foros nacionales ?Planeando juntos la transformaci?n de M?xico?. En el referido acto, el Presidente dijo: ?para nosotros ya se termin? esa pesadilla?, mientras que calific? al modelo de marras como una pol?tica de ?pillaje, antipopular y entreguista?.
Antes, en este mismo espacio, advert? que la encarnizada lucha contra el neoliberalismo ?- principal postulado de la llamada Cuarta Transformaci?n – continuar?a sin mayores limitaciones que la imaginaci?n de quienes la representan. As?, el mecanismo implementado en esta parte del globo desde 1982, fue y sigue siendo considerado (por no pocos) como el origen de los males que nos aquejan y de aquellos que est?n por venir. De ah? que no resulte sorprendente que en un discurso presidencial? (no as? en la pr?ctica) el mencionado est?ndar econ?mico sea destrozado en forma inmisericorde y se llegue al extremo de asegurar su conclusi?n definitiva.
El mensaje del mandatario nacional ofrecido el pasado domingo, bien puede ser escuchado cual si se tratase de una grabaci?n en disco de acetato (los millennials pueden consultar con el t?o Google a que formato de reproducci?n me refiero). En el ?lado A?, ?el se?or L?pez hizo un llamado a buscar – entre todos – la propuesta que haga posible el desarrollo, el ordenamiento pol?tico y la convivencia entre los sectores sociales; es decir, aquella que permita implementar pr?cticas en las que el crecimiento econ?mico no ri?a con la justicia social (nunca mejor dicho). Sin embargo, el contendido del ?lado B? gener? cierta inquietud entre el respetable; en esa parte, el principal inquilino de Palacio Nacional dijo que deb?amos ser capaces de consolidar un Plan Nacional de Desarrollo que no dependa de modelos ni de recetas del extranjero y afirm?, adem?s, que las estrategias de mercado ya no sustituir?n la labor del estado. ?Ah que carambitas!, exclamar?a con asombro el buen amigo Fernando Magallanes.
Al escuchar tales enunciados, no pude evitar traer a la memoria el rifirrafe protagonizado por el Gobierno de M?xico y las calificadoras internacionales de riesgo.
Recordemos que a principios del mes de febrero, Standard and Poor?s cambio la perspectiva crediticia de M?xico, de estable a negativa; igual suerte corrieron las empresas productivas del estado PEMEX y CFE. Previamente, Fitch Ratings y Moody?s ya hab?an disminuido el perfil de la petrolera mexicana. Frente al deterioro se?alado por las calificadoras, las huestes de Morena de inmediato las pusieron en la mira. Los senadores de aquel partido colocaron sobre la mesa la propuesta de revocar el permiso de trabajo a las agencias que emitan evaluaciones que atenten contra la estabilidad financiera del pa?s. Al respecto, Salom?n Jara, vocero de la bancada morenista en el Senado, advirti? que las calificadoras est?n chantajeando y presionando al gobierno y que el an?lisis de ?stas empresas (cuando no se hace en t?rminos positivos) puede llevar a la quiebra a cualquier econom?a.
El conflicto de M?xico con las calificadoras, cuyo desenlace no ha sido a?n revelado, y el anuncio sobre el fin del neoliberalismo, sirven como botones de muestra para dibujar un escenario en el que el aislamiento de nuestro pa?s respecto a los mercados internacionales parece ser el futuro pretendido por el nuevo r?gimen.
Aqu? en confianza, m?s all? de las arengas pol?ticas que siempre son necesarias para elevar el nivel de confianza entre la poblaci?n, debemos reconocer que M?xico se encuentra inmerso en una relaci?n globalizada de la que dif?cilmente puede sustraerse mediante decreto (por m?s que as? se quiera). ?Ahora ? nos guste o no -? es indispensable saber identificar las directrices internacionales que marcan los poderes econ?micos, para llevar a buen puerto el ideal de crecer efectivamente, al tiempo que se garantiza una justa distribuci?n de la riqueza.
Lo dije antes y lo reitero: todos, absolutamente todos queremos (o debemos querer) que el Presidente de los mexicanos logre alcanzar sus prop?sitos de desarrollo y combate a la pobreza; sin embargo, el dise?o de las pol?ticas econ?micas requiere de una gran dosis de conocimiento, habilidad, t?cnica y experiencia; por que, como lo afirm? el economista y fil?sofo de origen escoces, Adam Smith: ?la ciencia es el gran ant?doto contra el veneno del entusiasmo y la superstici?n?. Ah? se los dejo para la reflexi?n.