Quiero todo el peso de la ley contra feminicida de mi hija Brisa: Gloria Marisa

Luis Carmona | Factor

NUEVA ROSITA,COAH.- La madre de la menor víctima de feminicidio rompió el silencio develando que quiere todo el peso de la ley en contra del asesino de su hija, considerando que su pequeña no era mala y hacía un gran esfuerzo por superar el abuso sexual que fue víctima en víspera de su cumpleaños en enero del presente año.

Con lágrimas en los ojos la señora Gloria Marisa Castellanos Márquez, dijo que se enteró de la muerte de su hija por una vecina que fue a darle el pésame, porque hasta la fecha ninguna autoridad judicial ha sido para presentarse en su domicilio para notificarle del trágico deceso que tuvo la menor.

Han pasado tres días desde la localización de Brisa en un predio de Rancho Nuevo en el ejido Santa María y sus restos bilógicos no ha sido entregados a la mamá y la señora develó que no fue requerida por la Fiscalía para rendir declaraciones en torno a la investigación por el crimen cometido en contra de su hija.

Afligida, comentó que desconoce todo detalle del móvil del crimen y espera información de las autoridades judiciales, alegando que su pequeña no merecía morir de esa manera en manos de un desalmado sujeto que hasta el momento aclaró que nunca conoció; pero sabía que Brisa tenía contacto con él vía celular.

La entrevistada confirmó que su hija conoció a Luis en la cárcel municipal de Nueva Rosita cuando fue detenida por consumir drogas en la vía pública y permaneció por varios días encerrada, porque no tuvo dinero para saldar la fianza.

Desde ese día, la menor quedó impresionada con el extraño sujeto que conoció en las celdas preventivas y sostenía constante comunicación por mensajes de texto en los teléfonos móviles, mintiendo que se comunicaba con sus amiguitas.

Incluso la menor se escapaba de casa para ir de paseo junto a él y otras amigas menores de edad que la acompañaban, a todos lados según comentarios que escuchó de vecinos y conocidos.

“Nunca estuve de acuerdo en esa amistad, pero mi hija fue rebelde e insistió en verlo que fue breve el tiempo que pasó para que ese sujeto me la matara por motivos que desconozco y no alcanzo a comprender, porque mi hija tuvo que morir así ”.

Marisa negó todas las especulaciones de la gente, relacionadas a los maltratos físicos de su padrastro, reconociendo que sí le hacia llamados de atención, pero jamás permitió qué le levantara la mano.

Envuelta en dolor también aclaró que jamás prostituyó a la menor, porque esos rumores surgieron de los mismos elementos policiacos, quienes en su afán de hacer daño inventaron que esas patrañas para afectar la reputación de la niña.

“Mi hija no era prostituta era una excelente estudiante en la escuela, pero también no quería asistir, porque sus compañeros le hacia bullying por ser víctima de violación hacían expresiones despectivas que estaba agujerada, por eso en una ocasión la pequeña dijo que se quería matar y la motivé para que fuera a clases de box, deporte que fue una terapia para que olvidara los malos ratos”.

“Sin embargo la relación con Luis apodado el “tornado” jamás quiso ponerle fin y esa persona fue astuta para envolver a mi hija y hacerla escapar de casa, para irse de paseo con otras personas de las cuales  son vecinas y ahora no me dirigen la palabra, ofendidas; porque reclame que ellas sabían dónde estaba mi hija y no quisieron decir”.

Ahora la desconsolada madre de familia espera recuperar su hija para darle cristiana sepultura y esperar a que la ley haga lo suyo en contra del asesino y su cómplice de quienes negó conocer y toda esta tragedia vino a escurecer su vida esperando el perdón de su hija por no saberla proteger, puntualizó.