El dominio de Verstappen exhibe a sus compañeros y revaloriza la gestión de Checo Pérez, único que logró sobrevivir con resultados
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CIUDAD DE MÉXICO.– El asiento número dos en Red Bull Racing se ha convertido en una pesadilla constante desde 2019. Con el ascenso definitivo de Max Verstappen como figura principal del equipo, la escudería austriaca no ha logrado consolidar a un compañero competitivo a su lado, pese a múltiples intentos. El más reciente en padecerlo es el japonés Yuki Tsunoda, quien ha quedado a deber en sus primeras carreras con el equipo.
Desde que Daniel Ricciardo dejó Red Bull al final de 2018, cinco pilotos han compartido garaje con el neerlandés. Pierre Gasly, Alex Albon, Sergio Pérez, Liam Lawson y ahora Tsunoda han tenido resultados muy dispares. Solo Pérez logró cierta estabilidad y entregó números significativos durante tres temporadas, siendo pieza clave en los títulos de Verstappen, especialmente en 2021 y 2023.
Sin embargo, desde la segunda mitad de 2023, el rendimiento del mexicano cayó, y su salida fue confirmada al concluir la temporada 2024. Pese a su bajón, los datos reflejan que su aporte fue, hasta ahora, el más valioso detrás del campeón: 29 podios, cinco victorias y más de 900 puntos.
El desafío de ser compañero de Max
El propio director de Red Bull, Christian Horner, ha reconocido que ser coequipero de Verstappen “es el trabajo más difícil en la Fórmula 1”. La comparación es directa e implacable. Max ha ganado 60 de los 65 Grandes Premios que Red Bull ha conquistado desde 2019. Checo aportó los otros cinco. Ninguno de los demás compañeros logró siquiera subir al podio regularmente.
Yuki Tsunoda, que inició 2025 como reemplazo definitivo, ha tenido un rendimiento decepcionante: su mejor resultado ha sido un noveno lugar en siete fechas. Su antecesor, Liam Lawson, fue descartado tras apenas dos carreras.
“Cuando llegué a Red Bull, sabía lo difícil que era. Grandes pilotos como Gasly y Albon tuvieron problemas. Yo estuve tanto tiempo que todos olvidaron lo complicado que es manejar ese coche”, dijo Checo Pérez en abril.
Una historia de contrastes
Las cifras son contundentes. Desde 2019, Red Bull ha registrado 125 podios: 94 de Verstappen, 29 de Pérez, y solo dos más, de Albon. Gasly, Tsunoda, Lawson y Ricciardo (en su breve regreso) no han logrado sumar. En cuanto a puntos, Verstappen ha aportado 2,490.5 unidades de un total de 3,673.5 para el equipo, es decir, el 68%. Todos sus compañeros juntos no alcanzan siquiera la mitad.
En los duelos directos:
- Verstappen venció a Gasly 11-1
- A Albon, 17-9
- A Checo, 79-11
- A Lawson, 2-0
- A Tsunoda, 7-0 (hasta ahora)
El segundo coche ha sido incapaz de competir al nivel necesario. En 2023, Red Bull perdió el campeonato de constructores ante McLaren, donde tanto Norris como Piastri aportaron puntos de manera constante.
La incógnita para 2026
La situación representa un problema estratégico. Sin el dominio abrumador del RB19 o RB20, Verstappen necesita el respaldo de su compañero para ejecutar estrategias colectivas. Esa sinergia ya no existe, y Red Bull volverá al mercado para encontrar a alguien capaz de sostener ese segundo asiento.
Quizá, como en 2021, la respuesta no esté en los jóvenes de su academia, sino en un veterano dispuesto a jugar un rol táctico. Un perfil que, aunque haya sido criticado en sus últimos meses, encarnó Sergio Pérez durante su mejor etapa.
