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CIUDAD DE MÉXICO.- En plena cuenta regresiva para los duelos de ‘playoffs’ de ascenso a LaLiga, el Racing de Santander ha sacudido el panorama futbolístico con una noticia que ilusiona profundamente a su afición: el posible regreso de Sergio Canales, uno de sus hijos pródigos, a El Sardinero.
El presidente del club cántabro, Manolo Higuera, encendió las alarmas –de emoción– tras declarar en una entrevista con El Larguero de la Cadena SER que ha mantenido contacto directo con el actual jugador de Rayados de Monterrey, y que la puerta para su vuelta está más abierta que nunca.
“Los números con Sergio cuadran siempre. Tengo una relación personal con él desde hace tiempo, y hoy mismo hemos cruzado mensajes. Siempre me ha transmitido lo mismo: su ilusión es volver a jugar en el Racing”, reveló Higuera.
Pero la ilusión va más allá de palabras. El directivo dejó claro que la voluntad del futbolista no depende de la categoría en la que milite el equipo santanderino.
“Él me ha dicho que no es ningún problema estar en Primera o en Segunda División. Como su ilusión es la misma que la mía, estoy convencido de que, a corto plazo, Sergio Canales volverá a vestir la camiseta del Racing. Es un sueño compartido por todos”, añadió con emoción.
Actualmente con 34 años, Canales atraviesa un momento importante en su carrera. Se encuentra a las puertas de disputar el Mundial de Clubes con el conjunto regiomontano y tiene contrato vigente hasta junio de 2026, lo que, en principio, pondría en pausa cualquier movimiento inmediato. No obstante, en el fútbol todo puede cambiar de forma repentina.
Formado en las categorías inferiores del Racing, Canales debutó con el primer equipo en 2008 y su talento lo catapultó rápidamente al Real Madrid, iniciando así una destacada trayectoria que también lo ha llevado por el Valencia, la Real Sociedad y el Real Betis, antes de su actual etapa en el fútbol mexicano.
Aunque por ahora el regreso parece más un deseo que una realidad inmediata, las declaraciones de Higuera han desatado la ilusión entre la hinchada verdiblanca, que sueña con ver de nuevo a Canales liderando al equipo de sus amores, quizá para devolverlo definitivamente a la élite del fútbol español.
El sueño está latente. Y en Santander, ya se empieza a sentir como una posibilidad real.