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Bilbao, España.- El FC Barcelona puso el broche de oro a una temporada memorable al imponerse este domingo por 3-0 al Athletic Club en San Mamés, en el último compromiso de LaLiga 2024-2025. Aunque el título ya había sido asegurado matemáticamente dos jornadas antes, los azulgranas no bajaron el ritmo y ofrecieron una actuación sólida en un duelo que, si bien era intrascendente en lo clasificatorio, sirvió como escaparate de su dominio.
El delantero polaco Robert Lewandowski fue la gran figura del encuentro con un doblete temprano (minutos 14 y 17), mientras que Dani Olmo sentenció el marcador desde el punto penal en el tiempo añadido (90+4).
Con esta victoria, el Barça cerró la temporada liguera con 102 goles a favor, reafirmando su potencia ofensiva. Para Lewandowski, la noche también tuvo un significado especial: alcanzó su gol número 101 con la camiseta azulgrana desde su llegada al club hace tres campañas.
El atacante de 36 años, que no marcaba un doblete desde el 9 de abril ante el Borussia Dortmund en los cuartos de final de la Champions League, aprovechó al máximo sus oportunidades. Una prolongada lesión y una posterior falta de ritmo le impidieron competir hasta el final por el Pichichi, que fue a manos del francés Kylian Mbappé, delantero del Real Madrid, con 31 goles. Lewandowski finalizó el campeonato con 27 tantos, una cifra notable aunque insuficiente para alzarse con el trofeo.
El primer tanto del polaco llegó tras una brillante jugada colectiva iniciada por Pedri, quien filtró un pase preciso para Fermín, que a su vez asistió a Lewandowski. Este controló con clase y definió con una sutil vaselina ante la salida del arquero Unai Simón. Apenas tres minutos después, el segundo gol llegó tras un córner lanzado con gran efecto por Raphinha, que fue peinado por el defensa Unai Gómez en dirección a su propio portero, provocando el despiste de Simón y permitiendo que Lewandowski empujara el balón al fondo de la red sin oposición.
En el cierre del encuentro, Yuri Berchiche cometió una falta dentro del área sobre Dani Olmo, quien ejecutó el penalti con sangre fría y selló el 3-0 definitivo.
Más allá del resultado, el ambiente en San Mamés estuvo cargado de emoción, especialmente con la sentida ovación que la afición local brindó a Óscar de Marcos, quien disputó su último partido con la camiseta rojiblanca tras 16 temporadas al servicio del Athletic Club. Un homenaje merecido para uno de los jugadores más emblemáticos del club en las últimas décadas.
Con esta victoria, el Barcelona cierra una campaña de ensueño en la que conquistó LaLiga, la Supercopa de España y la Copa del Rey, todas ganadas al Real Madrid, consolidando un dominio absoluto en el fútbol español. Por su parte, el Athletic también culmina un excelente curso, asegurando la cuarta posición en la tabla y el ansiado regreso a la Liga de Campeones para la próxima temporada.
