Por/Factor
MADRID. – El expresidente de Brasil Jair Bolsonaro abandonó el hospital después de haber permanecido ingresado tres semanas tras someterse a una nueva operación abdominal, de más de doce horas, derivada de las secuelas de una cuchillada que recibió en 2018, cuando era candidato.
Bolsonaro salió por su propio pie del hospital de Brasilia en el que se encontraba desde el pasado día 12 de abril, donde se sometió a una cirugía por una obstrucción intestinal, tras encontrarse mal en un acto de campaña de su partido. «Muchas gracias a quienes me acompañaron, a quienes rezaron y pidieron a Dios», dijo el expresidente a su salida del hospital, donde ha sido recibido por un grupo de seguidores, según recoge el portal de noticias G1.
Bolsonaro estuvo dos semanas en una unidad de tratamiento intensivo, si bien no le ha impedido recibir constantes visitas y mostrarse muy activo en redes sociales, incluso retransmitiendo en directo. Durante su estancia en el hospital, el Tribunal Supremo le envió una citación judicial por el delito de golpe de Estado por el que está siendo investigado, a la que respondió visiblemente contrariado.
Las visitas de Bolsonaro al médico por las secuelas del ataque de 2018 han sido recurrentes en los últimos años. Esta ha sido la sexta cirugía a la que se somete y la novena hospitalización desde entonces.
