
Llegan repatriados al albergue; hacen falta ropa y zapatos
Por: Cristina Flores Cepeda
San Juan de Sabinas, Coahuila. – En un acto de solidaridad y empatía, la comunidad de la Región Carbonífera está siendo invitada a unirse en un esfuerzo humanitario para apoyar a quienes más lo necesitan. Ante la llegada de repatriados al Albergue Migratorio ubicado en las instalaciones de la antigua maquiladora Sara Lee en Nueva Rosita, se hace un llamado a la ciudadanía para que contribuya con donativos de ropa y zapatos, especialmente para hombres.
Este albergue, que ha sido un espacio de recepción y apoyo para quienes atraviesan momentos difíciles en su camino, al ser regresados a su país, algunos de ellos después de varias décadas de permanecer en el vecino país del norte como ilegales, requiere de la colaboración de todos para brindarles un poco de confort y dignidad en estos momentos de vulnerabilidad. La ayuda puede marcar una diferencia significativa en la vida de estas personas, ofreciéndoles un poco de esperanza y apoyo en su proceso de regreso, en el cual llegan con la ropa que traen puesta.
Los donativos de ropa y zapatos para hombres pueden entregarse directamente en el albergue migratorio, donde el personal y los voluntarios están coordinando la recepción y distribución de las donaciones. La comunidad puede colaborar con prendas en buen estado, limpias y en condiciones adecuadas, que puedan ser útiles para quienes llegan al lugar y que van de paso hacia su estado de origen porque sus pertenencias allá se quedaron.
Es un llamado a la solidaridad que refleja la sensibilidad y el compromiso de la comunidad de la Región Carbonífera, con los valores de apoyo mutuo y empatía hacia quienes enfrentan dificultades. La generosidad de cada uno puede aliviar en gran medida las necesidades básicas de los repatriados, quienes la mayoría de las veces dejan atrás sus pertenencias porque los ubican en la calle o en sus centros de trabajo. Regresan con las manos vacías pero con un espíritu agradecido por la manera en que les responde la gente en su país.
Las autoridades y organizaciones que atienden el albergue, agradecen de antemano la colaboración y la solidaridad de todos los ciudadanos. Cada donación, por pequeña que parezca, representa un acto de amor y humanidad que puede marcar la diferencia en la vida de quienes más lo necesitan. Está demás señalar que en estos tiempos, la unión y la empatía son fundamentales para construir una comunidad más fuerte y solidaria. La invitación es a todos a sumarse a esta causa, demostrando que la empatía y la ayuda mutua son valores que nos unen y fortalecen como sociedad. Para más información o para coordinar donaciones, pueden comunicarse directamente con el albergue migratorio en Nueva Rosita. La colaboración de todos es esencial para seguir construyendo un entorno de apoyo y esperanza para quienes atraviesan momentos difíciles. «Muchas gracias por su generosidad y por ser parte de esta cadena de solidaridad que refleja lo mejor de nuestra comunidad».
