
Por/Factor
Estados Unidos. – Donald Trump ha frenado su “ofensiva arancelaria”, de tal forma que el 72 por ciento de los gravámenes, que había impuesto, se suspendieron de manera temporal o indefinida, según Statista. Las tarifas específicas, para cada país, que han sido suspendidas, van desde un 11 hasta un 50 por ciento adicional.En el caso de los productos importados desde México y Canadá también fueron ajustados, los cuales se han visto afectados por 504 y 412 mil millones de dólares, respectivamente.
Aunque inicialmente se impusieron aranceles del 25 por ciento, estos fueron modificados a pocos días de haber entrado en vigor; toda vez que las importaciones protegidas y acordadas anteriormente bajo el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) quedaron exentas, lo que según la Tax Foundation, ha reducido a la mitad el valor de los bienes sujetos a aranceles en ambos países. Aún así, los bienes que no cumplan con las especificaciones del tratado podrían enfrentar nuevas tasas arancelarias de hasta 12 por ciento en un futuro cercano.
Esta suspensión arancelaria surge a raíz de considerar el valor afectado de las importaciones de los gravámenes, los cuales según la Tax Fundation, dañan alrededor de 2 billones de dólares en importaciones estadunidenses, incluidas las importaciones de China. A pesar de las reducciones y pausas, aún se mantiene un arancel adicional menor, del 10 por ciento, sobre la mayoría de las naciones, lo que hace que la acción arancelaria se suspenda en su mayor parte. Este hecho alivió las tensiones en los mercados internacionales, pero ha dejado un panorama comercial incierto, ya qué para China la situación es diferente.
Aunque desde la implementación de gravámenes hacia Pekín han tenido un impacto importante en la economía mundial, sumergiendo por momentos a los mercados bursátiles y causando pérdidas económicas que quedan para la historia, el presidente estadunidense no ha dado paso hacia atrás. Esto significa, qué los gravámenes para los productos de China, siguen vigentes, al igual que los aranceles sobre automóviles, acero y aluminio, afectando a las importaciones por un valor cercano a los 950 mil millones de dólares.