
FACTOR
REINO UNIDO.- En una sorprendente y sonrojante derrota, el Liverpool, líder de la Premier League y finalista de la Copa de la Liga, quedó eliminado de la Copa de Inglaterra este domingo al perder 1-0 ante el Plymouth Argyle, equipo que milita en la segunda división.
Un gol de penalti del escocés Ryan Hardie (53′) fue suficiente para tumbar a los ‘Reds’, que llegaron al encuentro con un equipo alternativo y sin algunas de sus figuras clave. Este revés llegó apenas tres días después de haber alcanzado la final de la Copa de la Liga, en una temporada que parecía encaminada hacia el éxito.
Un Liverpool con suplentes no pudo con el Plymouth
El técnico neerlandés Arne Slot decidió dar descanso a varios titulares, como Mohamed Salah, Virgil van Dijk, Alisson y Trent Alexander-Arnold, y alineó un once plagado de suplentes y jóvenes. Esta decisión dejó al Liverpool sin la potencia habitual, y aunque el Plymouth fue el equipo de menor categoría, su resistencia y determinación fueron claves para el resultado final.
A pesar de la diferencia de categorías, el Plymouth Argyle no se dejó intimidar y supo manejar el partido, defendiendo bien y aprovechando el penalti que definió el marcador. Los ‘Reds’ no fueron capaces de generar muchas ocasiones claras, y solo en los minutos finales, ya en tiempo añadido, pudieron haber empatado. Diogo Jota (90+3) y Darwin Núñez (90+9) tuvieron las oportunidades más claras, pero ambas fueron detenidas por el portero del Plymouth, Conor Hazard.
La sorpresa que obliga a replantear la estrategia
Con esta eliminación, el Liverpool ve truncado su camino en la Copa de Inglaterra, y ahora Arne Slot deberá encontrar la manera de reaccionar rápidamente para el crucial derbi de Merseyside contra el Everton, programado para el miércoles en la Premier League.
El tropiezo ante el Plymouth demuestra que, aunque el Liverpool tiene una plantilla amplia y talentosa, la falta de ritmo y cohesión en un equipo sin sus estrellas le pasó factura en esta copa.