El año que está por comenzar será absolutamente decisivo para definir el rumbo que tomará México en las próximas décadas. Cinco puntos centrales acapararán la atención nacional y marcarán la pauta de nuestro desarrollo político, económico y social.
1. Quizá el más trascendental sea el fin del mandato de López Obrador, que concluirá así con su controvertida administración. Será momento para balances reflexivos, más allá de filias y fobias, sobre los aciertos y errores de su gestión.
Habrá que evaluar objetivamente aspectos como el combate a la pobreza y la corrupción, el manejo de la pandemia, la política energética, las tensas relaciones con el sector privado, la militarización, así como el impacto de sus grandes obras insignia. El juicio sereno de la Historia comenzará a decantar cuál fue el legado real del sexenio lopezobradorista. El fin de su mandato marca el cierre de un capítulo excepcional (para bien o para mal) y profundamente controvertido en la historia política de México. Su legado, caracterizado por programas sociales ambiciosos y un enfoque disruptivo, ha dejado huellas profundas en la sociedad. Sin embargo, las críticas sobre la concentración de poder y la polarización persisten, desafiando la narrativa oficialista. La transición hacia un nuevo liderazgo se presentará como una oportunidad para evaluar y redirigir el curso del país.
2. Otro punto medular en este año será la elección de quien habrá de suceder a López Obrador, que, por primera vez, tendrá una real competencia entre dos mujeres de primera: Claudia Sheinbaum por Morena y Xóchitl Gálvez por la alianza opositora PAN-PRI-PRD. Lo que es un hecho (lo he dicho desde hace meses, antes incluso de que ambas fueran electas como candidatas de sus respectivas alianzas) es que la elección presidencial será un hito histórico con dos mujeres compitiendo por la máxima magistratura. Visiones divergentes para México, desde la consolidación del proyecto actual hasta propuestas de cambio significativo. Será delicioso escucharlas a ambas en cuanto la ley les permita comenzar a presentar propuestas concretas que den a conocer con mayor nitidez cuáles son las propuestas de su visión para abordar los desafíos del país. Insisto, yo, desde hace meses, ya celebro que México parece finalmente listo para tener por primera vez en su historia a una presidenta.
3. El desenlace de las elecciones en Estados Unidos también será clave, ya que definirá el tono de la relación bilateral con nuestro principal socio comercial. No es lo mismo lidiar con un Trump enrachado en una segunda presidencia (y recargado en sus prejuicios), que con un Biden más moderado y multilateralista. La posibilidad de un segundo mandato de Donald Trump plantea incertidumbre, dada su retórica confrontativa y políticas migratorias restrictivas. Por otro lado, un segundo mandato de Joe Biden ofrece la posibilidad de un enfoque más colaborativo, pero también plantea desafíos en áreas como el comercio y la seguridad fronteriza. México deberá adaptarse a cualquiera que sea el resultado, preparándose para la compleja interacción entre nuestras dos naciones interconectadas, con áreas de oportunidad nunca antes vistas, pero también con desafíos inéditos.
4. En el ámbito económico, el mayor reto será blindarnos ante una probable recesión global por la crisis energética, la inflación y el alza de tasas de interés de los bancos centrales. Se requerirán sólidas reservas y políticas fiscales y monetarias contracíclicas. La reconstrucción de la economía, afectada por la crisis global, requerirá decisiones audaces y estrategias innovadoras. La capacidad de la nueva presidenta para fomentar la inversión, impulsar la creación de empleo y garantizar la estabilidad financiera será esencial para revitalizar el país.
5. Finalmente, en el tema migratorio habrá que lidiar con el aumento de flujos desde Centroamérica por violencia y pobreza. Se necesitan acuerdos regionales y sensibilidad ante esta crisis humanitaria. México es un país de tránsito para millones de migrantes que buscan llegar a Estados Unidos. El gobierno mexicano debe encontrar una manera de atender las necesidades de los migrantes y de proteger sus fronteras.