Leyendo

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Por: Georgina Cano

?El que lee mucho y anda mucho, ve mucho y sabe mucho?- Miguel de Cervantes Saavedra; el ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha.

Les comparto que antes de ir a la escuela, aprend? a leer en casa.? La lectura era un h?bito consuetudinario en la familia.? Mis pap?s le?an por la noche, al igual que mis hermanas.? Como soy la menor de la familia, sol?a buscar alg?n libro con im?genes y hac?a como que lo le?a imaginando lo que dir?an los personajes.? De esta manera inici? mi inter?s por la lectura.

Mi hermana Marcela me ense?? a leer.? Creo que tuvo que ver el hecho de que constantemente interrump?a su propia lectura para preguntarle qu? dec?a mi libro siendo ella tambi?n una ni?a, y entonces, me ense?? a convertir letras en sonidos y despu?s juntarlas para convertirlas en palabras y as? surgi? la magia que hasta hoy mantiene mi inter?s por los libros, lo cual le agradezco infinitamente.

Una vez que aprend? a leer, mi pap? me ped?a que lo acompa?ara a comprar peri?dicos y libros y me permit?a seleccionar alguno para m?, as? que ante el aburrimiento de las tardes que me parec?an eternas cuando ni?a, buscaba algo que leer.

La lectura nos permite conocer lugares, identificarnos con personajes, aprender historia, profundizar en temas de inter?s, conocer lo que pasa en el mundo y en culturas diversas, pero tambi?n a trav?s de la novela y la ciencia ficci?n es posible olvidarnos de los problemas p?gina a p?gina.

A veces de un buen libro hacen una pel?cula que luce austera al lado del libro.? Leyendo hacemos los personajes a nuestro gusto, imaginamos cada detalle, lugares, escenarios, paisajes y formas.

Regresando a mi ni?ez, y al origen de la lectura en casa, me parece que adem?s de que era fomentada por mis padres, no hab?a tantas distracciones.? La televisi?n ofrec?a unos cuantos canales con programas definidos por horarios, no hab?a computadoras, ni internet, ni tel?fonos celulares.? En el presente, la informaci?n e historias fluyen r?pidamente y en un libro hay que tener suficiente paciencia para recorrer sus p?ginas.? Esto no significa que sea imposible fomentar la lectura que nos ofrece much?simo m?s que un documental, un video, un tuit o una visita al cine.

Reflexionando en el tema, decidimos en casa imponer nuevas reglas, de inicio no muy bien vistas por nuestros hijos, pero al final del d?a implementadas y aceptadas.? A partir de cierta hora de la tarde se proh?be la televisi?n y videojuegos y una hora antes de ir a dormir la ?nica actividad permitida es la lectura.? Tienen libertad para escoger qu? quieren leer dentro de los libros que cuidadosamente seleccionamos para ellos conforme a su edad.

Lo han tomado bien, ya se emocionan y antes de dormir me platican algo sobre las historias le?das o el aprendizaje adquirido; me parece que tenemos el deber de ayudar a los peque?os a eliminar las distracciones muchas veces poco productivas y fomentar en ellos la realizaci?n de actividades positivas.

Procuro que me acompa?en a la librer?a cuando voy a comprar un libro, tiempo en el que ellos disfrutan en la secci?n de libros para ni?os.

El amor por la lectura es algo que definitivamente vale la pena promover en las nuevas generaciones.? ?A ti qu? te gusta leer?