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0Es evidente que en las iglesias existe ultraje financiero, f?sico y hasta sexual en contra de la misma feligres?a
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No se denuncia por el manipuleo del temor a Dios
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Jorge Luis R?os Flores
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ACU?A, COAH.- Los pastores son los que llevan a sus bolsillos jugosas ganancias econ?micas cuando presiden una iglesia que est? en la informalidad, ya que no hay regulaci?n de los donativos, ni en especie ni en dinero, que los feligreses aportan con ?devoci?n y fe?, de acuerdo al pastor y contador p?blico, Tomas Hern?ndez.
La construcci?n de los edificios en donde se congrega la gente se hace gracias a donaciones de particulares y por ende no se tiene un registro de quien aport? un bloque, un bulto de cemento, varilla etc?tera; por consiguiente cuando se disuelve la iglesia en la mayor?a de los casos el pastor vende el edificio y se queda con el dinero, explica Hern?ndez.
Si una iglesia est? regularizada, inscrita ante la Secretaria de Gobernaci?n, cuando se disuelve esta tiene que donar su edificio y todos sus bienes a otra congregaci?n y jam?s se debe de comercializar, destaca el pastor.
El estar en la informalidad una iglesia propicia vicios entre sus dirigentes y que se aproveche de la fe de sus seguidores, admite, y aunque las autoridades han planteado la necesidad de regularizar a las iglesias esto no da resultado debido a que para quienes las ?manejan? significan jugosos negocios que hasta en ocasiones provocan pleitos familiares.
Para los ministros es mucho m?s ventajoso es estar en la informalidad que en el Registro Constitutivo como Asociaci?n Religiosa, pero los feligreses pueden denunciar ante las autoridades cualquier anomal?a como el darse cuenta que un pastor se hace rico de la noche a la ma?ana o bien que vende el patrimonio de la Iglesia.
Sin embargo, explica el pastor Tomas Hern?ndez, la gente no lo hace porque est? amenazada por sus representantes ante Dios de que si algo hacen mal en contra de ellos, les ir? peor como castigo.
