By: Me
El maestro sufi contaba siempre una par?bola al finalizar cada clase, pero los alumnos no siempre entend?an el sentido de la misma… -Maestro- le encar? uno de ellos una tarde. T? nos cuentas los cuentos pero no nos explicas su significado… -Pido perd?n por eso. -Se disculp? el maestro- Perm?teme que en se?al de reparaci?n te convide con un rico durazno. -Gracias maestro.-respondio halagado el disc?pulo. -Quisiera, para agasajarte, pelarte tu durazno. ?Me permites? -Si, muchas gracias. -?Te gustar?a que, ya que tengo en mi mano el cuchillo, te lo corte en trozos para que te sea m?s c?modo?…-Me encantar?a, pero no quisiera abusar, maestro. -No es un abuso, solo deseo complacerte. Permite que te lo mastique antes de dartelo. -?No maestro. ?No me gustar?a que hicieras eso!- Se quej? el disc?pulo. El maestro hizo una pausa y dijo: -Si yo les explicara el sentido de cada cuento…ser?a como darles a comer una fruta masticada. (J. Bucay) «Por tanto buena es la sal, pero si tambi?n la sal ha perdido su sabor, ?con que ser? sazonada? No es ?til para la tierra ni para el muladar; la arrojan fuera. El que tenga oidos para o?r, que oiga» Lucas 14:34-35 -? Para sonre?r: ) Llega un individuo majadero y le dice al anciano y bondadoso sacerdote: » Lo que afirma el Genesis es una vil mentira, no creo que todos los hombres del mundo somos hijos de Eva». -Tienes raz?n hijo, la verdad es que antes de hacer a Eva, el Se?or hizo a otra mujer. Pero el barro con que la form? estaba manchado y al cocerlo, esa primer mujer salio tiznada. Entonces se le ocurri? a Dios la idea de hacer a Eva de la costilla del hombre. Por eso existen dos clases de hombres: es claro que yo soy hijo de Eva y t? un hijo de la Tiznada!
